Nos consultan cómo hacer para que los viajes en auto no sea un calvario para ningún integrante de la familia. Bueno empecemos por el comienzo, es decir que los adultos deben programar las cosas para que no sea un calvario el viajar.
¿Cómo hago? Decía el mensaje que recibimos en la redacción y los profesionales responden que mucho depende de la personalidad de la criatura, muchos duermen, otros son inquietos, otros son demandantes, los hay que les hace mal el viajar. Lo importante es que, como dijimos, los padres se planteen como es cada hijo para que puedan tener a mano todo lo necesario para disfrutar de un confortable viaje.
No está de más un poco de música suave, siempre sirve para relajar a los niños e incluso a quien conduzca. Como dicen los psicólogos es indispensable que se genere un clima adecuado para viajar y esto depende mucho de que los padres no se ofusquen de antemano. Deben estar dispuestos por ejemplo a cantar, sonreír bastante, hacer paradas para distender un poco y sobretodo perder el apuro por llegar.
Los viajes se aprenden de a poco, tanto grandes como niños, para que de verdad se cumpla lo que la canción dice “el viajar es un placer que nos puede sorprender”.