Conoce y configurar sistemas de protección

Para protegernos de los diferentes tipos de ataques a nuestro sistema informático, disponemos de una gran cantidad de herramientas que lo harán más seguro. Estas herramientas son los antivirus, los antiespías y cortafuegos. Para protegernos de los diferentes tipos de ataques a nuestro sistema informático, disponemos de una gran cantidad de herramientas de protección que lo harán más seguro.

Sin embargo, tenemos que aprender y poner en práctica una serie de normas de seguridad básicas, como no abrir ni responder mensajes de correo electrónico de desconocidos, utilizar contraseñas de acceso alfanuméricas, o, cuando navegamos por Internet, no pulsar cualquier enlace o botón de una página web.

Antivirus

Un antivirus es un programa que presenta varias funciones:

  • Analiza el disco duro, o cualquier soporte de almacenamiento del ordenador, a fin de encontrar archivos infectados por virus. El programa compara partes de un archivo con los contenidos de archivos de virus conocidos. Por eso es tan importante mantener actualizado el antivirus.
  • Elimina los virus encontrados. Según cómo esté configurado el antivirus, el programa elimina el virus o lo pone en cuarentena.
  • Evita que el virus esté activo.
  • Analiza el correo electrónico.
  • Analiza las páginas web que se visitan cuando navegamos por Internet.

Los antivirus se pueden obtener en línea, aunque algunos de ellos son de pago, y también las actualizaciones (programas como Norton o McAfee). Otros programas son gratuitos, especialmente para usuarios domésticos, como por ejemplo Avast !, AVG Antivirus o CLAM AV. Para instalar un antivirus en línea, normalmente se debe descargar y ejecutar el archivo setup.exe. Una vez ejecutado, aparecen diferentes ventanas (licencia, ubicación del programa, configuración, etc.) hasta que el programa queda instalado.

Es muy importante mantener actualizado el programa. La actualización se puede hacer de forma manual o de forma automática, cuando el ordenador está conectado a Internet. Normalmente, los sistemas operativos de software libre sufren menos problemas de seguridad que el sistema operativo Windows.

Antiespías

Los programas espías se instalan en nuestro ordenador mientras navegamos por Internet, la llenan de publicidad y obtienen datos nuestros sin permiso. Podemos eliminarlos utilizando un programa antiespía. Hay antivirus que llevan esta función incorporada. Algunos programas antiespías que se pueden descargar gratuitamente de Internet son Ad-aware o Spybot.

El procedimiento para descargarlos es el mismo que seguimos con los antivirus en línea.

Cortafuegos

Un cortafuegos es un programa que filtra y bloquea las comunicaciones en red (Por Internet o por red local) no deseadas; es decir, que protege la información de intrusiones externas y optimiza el acceso por niveles a los diferentes programas y aplicaciones que varios usuarios de un ordenador pueden utilizar.

El sistema operativo Windows XP incluye por defecto un firewall. La configuración permite activarlo, con excepciones o sin, o desactivarlo. La pestaña de opciones avanzadas permite activar o desactivar los cortafuegos para una conexión en concreto.

En la pestaña de excepciones, podemos seleccionar en ellas los programas o servicios que no quedarán bloqueados por los cortafuegos. Cuando se utiliza un enrutador (router) para conectarse a Internet, también debemos utilizar un cortafuegos.

En las últimas décadas se han producido cambios a nivel tecnológico que han repercutido en todos los órdenes de nuestra vida. La evolución de las nuevas Tecnologías de la Información se ha dado a pasos agigantados. Las bases de datos son cada vez más potentes, Internet se ha consolidado como el medio de comunicación global por excelencia y la telefonía móvil a ha demostrado una penetración en el mercado que era impensable hasta hace algunos años atrás.

En este nuevo contexto, y como consecuencia del uso intensivo de las nuevas tecnologías, se vienen produciendo intensos cambios en nuestras necesidades, preferencias, costumbres, hábitos de consumo y comportamientos. La mayoría de nosotros contamos con un celular con acceso a Internet para estar online cuándo y desde dónde queramos compartiendo nuestra ubicación, imágenes, música y todo tipo de archivos mediante distintas herramientas gratuitas y de fácil uso e instalación. Tenemos una cuenta en Facebook que nos permite estar en contacto permanente con gran parte de nuestra red social incluyendo a nuestros amigos, familiares, antiguos compañeros del colegio, de la universidad, colegas, amigos del club, vecinos… y hasta nos permite conocer y comenzar nuevas relaciones con amigos de nuestros amigos. Podemos contar a quienes estén interesados qué estamos haciendo, en qué estamos pensando a través de Twitter. Estas son sólo algunas de las herramientas basadas en la Web 2.0 que nos permiten estar conectados continuamente compartiendo ideas, contenido, opiniones, gustos o saberes con nuestra comunidad virtual, y el abanico está ampliándose continuamente con novedosas aplicaciones.

En este sentido, se puede definir como un concepto a la Web 2.0 como una actitud y no precisamente una tecnología, es una manera de entender y aprender a comunicarnos con herramientas tecnológicas de carácter informático que promueve que se desprenda el flujo de gran información enfocadas siempre al usuario final,  estas herramientas que cada vez hacen más fácil el acceso a la información provoca que las personas tengan menos complicaciones al acceder a este tipo de información y que sean reemplazadas  a las aplicaciones de escritorio.

La Web 2.0 entonces, en contraposición a su antecesora, se caracteriza por facilitar un entorno colaborativo, en el cual se generan relaciones multidireccionales ya que no sólo las organizaciones brindan información sino que los usuarios se constituyen en prosumidores, es decir que consumen pero también producen y comparten contenido. Se trata de una Web de relaciones, en la que se da lugar al desarrollo de conversaciones directas entre las organizaciones y el mercado y los usuarios entre sí, consolidándose ya como parte activa del sistema y no como meros receptores. Ahora los usuarios contribuyen con opiniones y comentarios, se suscriben a las actualizaciones de distintos sitios para recibirlas cuando son publicadas, comparten el contenido que les resulta interesante con sus propias comunidades o redes sociales valorándolo o calificándolo lo cual influye muchas veces sobre sus contactos.