Huelgas y más huelgas: ¿Hasta cuándo?

Este 22 de enero los peruanos hemos sido sorprendidos considerablemente, con la desagradable noticia de un nuevo paro de 48 horas, acatado por los trabajadores administrativos del Poder Judicial y Ministerio Público. Y es que, a pesar de haber sido declarada ilegal, desde hacía días atrás ya se rumoraba dicho paro. El reclamo puede, tener matices de justicia; sin embargo eso no impide que miles de expedientes judiciales queden “paralizados” originando el malestar de muchos litigantes. Los trabajadores administrativos, de estas instituciones, muestran de esta manera su rechazo a la implementación de la ley del servicio civil (ley servir) dentro del Poder Judicial. Así mismo, sostienen que el ejecutivo no cumplió con el incremento escalonado en las remuneraciones ofrecido el año pasado.

¿Cómo afecta esta situación la imagen del Poder Judicial frente a los litigantes? aceptadas por algunos jueces y claro el retraso en el manejo de los expedientes judiciales; esta última se ve acrecentada con los paros y huelgas que se han convertido en el pan de cada día. Por mencionar un ejemplo, sólo en lo que va del 2014, se puede observar que prácticamente no ha habido atención, y es que el día 01 de enero fue feriado según nuestro calendario y el día 02 no hubo atención en los juzgados, debido a la apertura del año judicial; cuando esperábamos que el día 03 se regularice dicha atención, nos dimos con la sorpresa de que se iniciaba el inventario correspondiente a los expedientes con trámite en proceso del año anterior, lo cual no permitió la atención en los juzgados, con normalidad. Terminados los inventarios, esperábamos ser atendidos, por lo menos, la última quincena de enero, sin embargo amanecimos el día 22, con la desagradable noticia del paro de 48 horas. Lo cual nos deja con sólo una semana de atención, del 27 al 31 de enero.

a los miles de procesos que esperan ser atendidos, esta situación, perjudica directamente, sobre todo, a alimentistas (juicios de alimentos) y reos (juicios penales). Lamentablemente, esta situación parece no tener solución, pues como se recordará el año pasado, los trabajadores del Poder Judicial acataron, varios paros, que culminaron con una huelga que duro varias semanas en los meses de noviembre y diciembre.

¿Quién o quiénes son los llamados a dar solución a esta difícil e incómoda situación? Hemos escuchado al ministro de economía, manifestar que el país no cuenta con los fondos (dinero) suficiente para incrementar los salarios de estos trabajadores administrativos, la pregunta no se hace esperar. ¿Cómo es que se aumentó el año pasado los salarios a los jueces? ¿De dónde se obtuvieron los fondos para hacerlo posible?

Recordemos que fue este aumento de sueldo, exagerado por cierto, lo que originó el reclamo, bastante justo, por parte de los trabajadores judiciales. Y es que parece inconcebible que laborando en la misma institución, las diferencias sean tan marcadas, y un trabajador administrativo pueda llegar a recibir una suma que oscila entre los S/. 750 y S/. 1300 nuevos soles, mientras que un Juez recibe la friolera de S/. 15,600 nuevos soles, si es juez supremo. Estos temas, desafortunadamente, no son novedad en el Perú, ya que aquí y solo aquí, los trabajadores mejor pagados son los congresistas, quienes encabezan la lista, los ministros, los jueces y fiscales, los alcaldes y algunos afortunados militares; mientras el grueso de la población conformada en su mayoría por trabajadores administrativos de las instituciones públicas, docentes y médicos estatales, no lleguen a recibir ni el 10% de estos sueldos.

Esta situación debe cambiar y no se trata de ofrecer aumentos que luego no se cumplan, se trata de ver a la raza trabajadora del Perú, como el motor que mueve el país y darle un salario justo, que le permita trabajar con entusiasmo y deseos de superación; sabiendo que el dinero que lleva a casa es suficiente para la alimentación, educación, vestimenta y recreación de sus hijos; ya que es esta preocupación, natural, la que origina reclamos, y al no ser escuchados huelgas, como los ocurridos en las últimas semanas. Siendo finalmente los perjudicados los más inocentes, los litigantes, entre ellos, miles de madres que confían en la administración de justicia para hacer cumplir sus derechos y conseguir una pensión para sus hijos.

El gobierno debe pensar en las miles de personas que están siendo perjudicadas con esta situación y dar una solución inmediata al caso, ya que, los trabajadores administrativos han amenazado con que, si sus reclamos no son escuchados en el transcurso de los siguientes días, irán tranquilamente a sus vacaciones de febrero, y cuando les corresponda volver a sus labores en el mes de marzo, iniciaran una Huelga Nacional Indefinida, en busca de la escucha de sus reclamos. Como se diría en el argot futbolístico, el balón esta en cancha del ejecutivo, esperemos que haga la mejor jugada en beneficio del país.

Escritor: Susana Verónica Icaza Enríquez