MY SISTER´S KEEP, UN DILEMA MORAL VISTO DESDE LA ÉTICA DE KANT

En el año 2004 la escritora norteamericana Judi Picoult publicó un libro titulado “My sister´s keep”, en el 2008 el libro se hizo película bajo la dirección de Nick Cassavetes y llegó a Latinoamérica bajo el título de La decisión más difícil. Una vibrante historia que encierra al lector en una serie de dilemas morales que no parecen dar a ganar nada en ninguna de sus salidas.

Sara y Brain Fitzgerald son una pareja de esposos que luego de tener Kate, su primer bebé, descubren que padece una terrible enfermedad: leucemia. Decidida a salvarle la vida a su hija, Sara abandona su trabajo como abogada para dedicarse de tiempo completo al cuidado de su hija. Sus esfuerzan no rinden mucho fruto, la esperanza de vida de Kate va en descenso y las opciones se acaban. Aparece una luz de esperanza en la idea de concebir un nuevo hijo, genéticamente modificado para ser compatible con el ADN de su hija, y que parece ser la única esperanza de supervivencia para Kate.

Su hermana, genéticamente manipulada, le brindará parte de sus órganos y fluidos indispensables para que Kate sobreviva. Los padres acceden y es así como nace Anna, una brillante y precoz niña que tiene que pasar toda su niñez en los hospitales sometida a interminables tratamientos para proporcionarle algo de bienestar a su hermana. En medio de ello está Jesse, el hijo adolescente de la familia Fitzgerald que nunca ha tenido la atención que necesita pues su hermana mayor ha absorbido por completo a su madre y su padre sortea infinidad de trabajos para poder cubrir los altos costos del tratamiento de Kate.

Anna, entrando en su pre adolescencia, descubre que su vida no es producto del amor de sus padres, resuena su frase “Cuando era niña, mi madre me dijo que yo era un pedacito de cielo que vino a este mundo porque ella y mi padre me amaban mucho. Fue después cuando entendí que eso no era particularmente cierto”- Anna. Cansada de tener que padecer insistentemente infinitas y muy dolorosas terapias, Anna reúne un poco de dinero y busca un abogado para pedir su emancipación clínica. Molesta, Sara va a juicio contra su propia hija que pretende dejar que el destino se encargue de su hermana mayor para ella poder tener una vida propia. ¿Qué ocurre entonces? En esta historia surgen diversos dilemas morales: (i) habiendo nacido Anna con el único propósito de ayudar a su hermana, esto es, siendo su hermana su único fin ¿es válido su deseo de emanciparse clínicamente? Anna es consciente de que su hermana morirá si ella deja de asistirla ¿recae sobre ella un juicio moral por no ayudarla?(ii) Sara y Brain concibieron a Anna con el único propósito de ayudar a Kate a sobrevivir ¿fue legítima- moralmente hablando- su decisión?

Una mirada desde Kant En la Fundamentación de la Metafísica de las Costumbre Kant se propone poner los fundamentos de de una moral universal que rija para todos los seres racionales. Su principio se sostiene a la base de una formulación “obra sólo según la máxima a través de la cual puedas querer al mismo tiempo que se convierta en una ley universal” (Kant, 1786, 421-6) esto es, cada vez que vayamos a tomar una decisión para una acción, debemos pensar si eso que vamos a hacer sería válido como ley universal. Su propósito es forjar una buena voluntad como bien supremo y en teoría seguir este principio nos ayudaría a aplicar la moral.

Si pasáramos la decisión de los esposos Fitzgerald por el test de esta máxima kantiana en principio diríamos que es posible querer engendrar hijos con fines salvíficos, esto es, con el objetivo de ayudar a otros siempre y cuando se le tratara con respeto y amor, esto es, que se le trate como hijos. Sin embargo, esa afirmación se queda en lo superficial. Kant hace tres formulaciones del imperativo con el objetivo de aplicarlo como norma práctica para los individuos. Nos dice “El hombre, y en general todo ser racional, existe como fin en sí mismo, no meramente como medio…sino que tiene que ser considerado en todas sus acciones, tanto en las acciones dirigidas a sí mismo como también a las dirigidas a otros seres racionales, siempre a la vez como fin” (Kant, 1786, 428-10).

El problema no radica en usar a alguien en determinado momento como medio, de hecho constantemente lo hacemos pues utilizamos a alguien para una labor o para una ayuda en pro de mi propio bienestar, pero eso lleva consigo la obligación de tratarlo siempre como fin. Sin embargo, hay que tener en cuenta la totalidad de la formulación, pues si pusiéramos la decisión de engendrar o no a Anna deberíamos tener en mente la máxima “obra de tal modo que uses a la humanidad tanto en tu persona como en la persona de cualquier otro siempre a la vez como fin, nunca meramente como medio” (Kant, 1786, 429-10). En este caso, de haber seguido esta norma, nunca se habría aceptado la idea de manipular genéticamente una persona para hacerla medio de supervivencia de otra. En conclusión, tanto el haber engendrado a Anna, como su posterior búsqueda de emancipación tienen en común en poner en aprietos a las dos partes y dejarlas sometida al peso de un juicio moral en su contra.

La historia concluye con la muerte de Kate. Durante el juicio de Sara contra Anna, esta última termina por confesarles a sus padres que fue Kate quien le pidió que se emancipara. Luego de que Sara aceptara el deseo de morir de su hija, ella muere al dejar de recibir tratamiento y esto al parecer hace que la familia encuentre desde una paz que no habían sentido hace mucho. Sara aprende que la muerte de su hija mayor es un pérdida que a la larga le dejó grandes cosas, ahora tiene dos hijos que no había atendido por estar pendiente de Kate y en ellos está toda su felicidad que estaba buscando.

Bibliografia

KANT I., (1786), Fundamentación de la Metafísica de las Costumbre. Edición Bilingüe y taducción de José Mardomingo. Editorial Aries, S.A. Barcelona.1996.

Escritor: Andres Sandoval

Los comentarios están cerrados.