TRAS EL HALLAZGO DE LOS HÁBITOS CONTEMPORANEOS

Un mundo lleno de contrastes. Esa sería la forma más primorosa de definir la contemporaneidad, sin darle un sentido menor al que merece. Aunque ni siquiera alcanzaría a llamarse contemporaneidad ya que está acompañada de muchos rezagos de la modernidad y de otras épocas que no le han permitido tener y desarrollar completamente su propia ideología. Se le da el nombre de contraste para no decir: contradicciones, porque profundizando un poco mas, eso es lo que se vive hoy, un pequeño mundo global lleno de contradicciones. Un ejemplo de esto es el siguiente: la tecnología de hoy busca encontrar el origen del ser humano dentro del universo, pero también hace más para su propia extinción que para su conservación y finalmente de que le sirve al hombre encontrarse con su pasado si va a desaparecer por culpa de él mismo.

Otro aspecto importante es que por las muchas comodidades y ventajas que se tienen hoy, las personas se creen los superhombres y piensan que viven más felices que otras personas que vivieron tiempo atrás, pero en eso también se equivocan, está comprobado científicamente (según investigaciones) que las personas de otras épocas son igual o incluso mas felices (debido a que no existía tanto estrés) que las de la actualidad.

Este lapso de tiempo que se está viviendo, lleno de obras grandes por descubrir y con lo que se podría transformar el mundo y convertirlo en un mundo feliz, no controlado en laboratorio como lo plantea Aldous Hurley en su obra, donde todos viven controlados, sino como verdaderos seres pensantes y sin estar muy lejos de un verdadero “paraíso” donde todos sean verdaderamente libres; pero mientras tanto, se debe esperar el fin, no de la forma que se espera sino porque posiblemente un maniático esta planeando cosas no imaginadas que puedan destruir o se acabará el agua potable o quizás una nueva infección de laboratorio dará la vuelta al mundo o… son tantas las formas que muestran, que ya no se sabe cuál atender.

Lo cierto es que las soluciones a estos problemas si son escasas y no es la preocupación de las grandes potencias ni de los seres humanos mas influyentes. Porque ya son entes y personas los que tienen el dominio del mundo y no los grandes países. Así se observa en las actividades cotidianas de nuestro medio.

La contemporaneidad y el mundo contemporáneo se podrían definir entonces, como un fenómeno muy interesante de estudiar observando sus facetas desde diferentes áreas de nuestra vida corriente.

Autores como George Orwell veían un mundo controlado y no es de extrañarse porque siempre ha estado controlado por una gran fuerza ideológica que se ha valido de diferentes medios para vender una perspectiva del mundo. El mundo de hoy no se aleja mucho de esta realidad pues aunque no lo crean, todo está controlado y no por una, sino por muchas fuerzas de las cuales algunas, si lo quisieran, podrían llegar a crear un caos internacional. Tal es el caso de los que dominan las diferentes redes de comunicación, ya que hoy por hoy se encuentran más personas dependientes de estas. También el simple hecho de que un niño exija a los padres determinadas marcas de ropa y determinados artículos, deja entrever el consumismo vendido por los medios de comunicación. Estos medios de comunicación, los cuales han llevado a tantos problemas como el ya nombrado; además han tenido una grave complicación: los entes influyentes (sean o no gobernantes) han tenido el poder para tejí versar la información llevando al mundo ideas por conveniencia para algunos, siendo en la mayoría de los casos falsas. Un caso específico se nota en la obra 1984 del anterior autor citado: “Los ministerios en los cuales se dividía el sistema gubernamental, el ministerio de la paz, para los asuntos de guerra; el ministerio de amor, encargado de mantener la ley y el orden” y mas adelante “El ministerio del amor era terrorífico”. Aquí se ve cómo se disfrazan estos sistemas a través de los medios de comunicación para no parecer tan “malignos”. Pero realmente que sería del mundo sin medios de comunicación, nunca se hubiera desarrollado el concepto de aldea global planteado desde hace tantos años por Marshall Mc Luhan y por el mismo George Orwell al visualizar un mundo unificado hablando una solo lengua (neolengua) y controlado por unos mismos entes, esta globalización ha traído muchas ventajas, sin ella no se conocería tan expeditamente culturas de todo el mundo y se viviría la condena a una casi completa ignorancia de lo que sucede alrededor de los países. Una muestra concisa se observa cuando una persona viajaba (emigraba) hacia otro país, debía esperar un gran tiempo para comunicarse con su familia y amigos (si acaso podía hacerlo). Al presente, sin importar donde se encuentren, pueden hablar, escribir y hasta verse con una persona de una manera virtual mucho mas sencilla. El problema no son los medios de comunicación como ya se vio, porque estos son excelentes, el punto esta en saberlos usar. Los medios de comunicación se han visto afectados, como ya se nombro anteriormente, por corrientes políticas que no buscan otra cosa que obtener el manejo del poder sin importar el como. Pero no ha sido diferente en otras épocas, siempre ha habido un ente que dirige y toma el control sometiendo a todo el pueblo. Esto se evidencia en la antigüedad con el esclavismo y con los diferentes gobernantes que han tenido las naciones a través de la historia.

Autor:

Andrés Camilo Cardona Franco