El aprendizaje estratégico y organizado en la educación adulta

Muchas veces el fracaso escolar en la educación adulta se relaciona a problemas o deficiencias cognitivas de los alumnos, pero eso no es verídico en el 100% de los casos. En ocasiones, se debe a la forma no adecuada que emplean ellos para realizar sus estudios. Los jóvenes no saben tomar apuntes, lo que les lleva tener una nula abstracción y organización de ideas, una incapacidad de reconocer las ideas centrales de un texto. También se manifiesta un problema de organización del tiempo de estudio, reconocido por la mayoría de los educando, quienes no saben distribuir las horas del día de modo que puedan tener el tiempo para estudiar como para recrearse. Esto se debe a que la gran mayoría trabaja y estudia.

Considerando que el perfil del alumnado de la educación adulta apunta a jóvenes derivados de distintos establecimientos por mala conducta o bajo rendimiento se asocia que, en algunos casos, la falta de entrega de herramientas específicas que permitan al alumno autorregular la adquisición de conocimientos ha sido el factor fundamental de la situación antes mencionada. Por ello es necesario que el alumno optimice los procesos de comprensión y, de ese modo, podrá mejorar su rendimiento académico aprendiendo a desarrollar técnicas de estudio y manejo del tiempo. Así, el egresado de la educación adulta será una persona capaz de manifestar y evidenciar competencias estratégicas.

Lo que se plantea como solución es un modelo de aprendizaje constructivista, esto significa que el alumno conoce la realidad a través de los modelos que construye para explicarla y que estos modelos siempre son susceptibles de ser mejorados o cambiados. El constructivismo se plantea una como filosofía del aprendizaje basada en el supuesto que construimos una propia comprensión del mundo en que vivimos a través de nuestras experiencias. Tiene su énfasis en los procesos didácticos, centrados en el alumno y en su esquema de pensamiento. Su línea esquemática se divide en tres dimensiones: contenido, alumno, contexto, teniendo como punto de partida la experiencia y los conocimientos previos.

Inicialmente son los maestros, padres o compañeros que interactúan con el estudiante los responsables de que el individuo aprenda. Es en esta etapa donde el individuo está en su zona de desarrollo próximo lo que quiere decir que manera paulatina, la persona va asumiendo la responsabilidad de construir su conocimiento y guiar su propio comportamiento. La zona de desarrollo próximo es una etapa de desarrollo del ser humano, donde existe la máxima posibilidad de aprendizaje.

Algunas de las herramientas que se pueden utilizar para mejorar el aprendizaje estratégico en la educación adulta son las enseñanza de mnemotécnicas, técnicas de idea principal y secundaria, técnicas en la toma de apuntes, técnicas de mapa conceptual. En el caso de la organización en el estudio de los adultos se sugiere la enseñanza de diversas planificaciones, tales como: planificación de actividades fijas, planificación maestra, planificación semanal y planificación diaria.

Las mnemotécnicas son técnicas que apuntan a la capacidad de almacenar y recuperar contenidos procesados, entre ellas están las de: Asociación (encontrar un elemento propio del concepto o palabra que permita recordarla), acrónimos o palabras claves (es una palabra clave para recordar una lista, usando letras iniciales de otras palabras), Acrósticos o frases claves (se genera una frase u oración que represente el concepto y que parta con la primera letra de las palabras) e imágenes (se asocia el concepto a una imagen conocida y que permita recordarla).

La idea principal y secundaria consiste en identificar los textos que le dan sentido al párrafo. Existen diferentes métodos en la toma de apuntes (esquemático, en bloque y el sistema Cornell) que permite organizar y estructurar la información que entrega un texto. El mapa conceptual es una técnica que forma parte de las estrategias de organización y cuyo objetivo es comprender, retener y evocar información siendo una de sus ventajas representar de manera visual las ideas más importantes de un texto. Gestionar el tiempo de estudio consiste en regular o programar las horas del día para hacer un uso más eficiente del tiempo que permite el estudio y/o la recreación y la planificación, como herramienta en este asunto permite estructurar un sistema que facilite el cumplimiento de compromisos y plazos, por tanto, las metas asociadas.

La planificación de actividades fijas se obtiene registrando en un horario todas las actividades fijas que se tienen a lo largo de una semana, en la planificación maestra se deben anotar todas las actividades académicas y no académicas que hay que realizar en un semestre, la planificación semanal es la síntesis de lo que se debe hacer durante toda la semana y la programación diaria corresponde a las prioridades en el día para que se cumplan los objetivos semanales y semestrales. Dichos instrumentos entregan técnicas de trabajo para todo el alumnado adulto que necesita aprender a estudiar de una forma más eficaz y satisfactoria, o que necesita mejorar sus propias técnicas de estudio con el fin de favorecer el proceso de enseñanza – aprendizaje.

Escritor: Makarena Bustos Muñoz

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