NO HAY CAMINO HACIA LA PAZ, LA PAZ ES EL CAMINO

Sin lugar a dudas los seres humanos en su proceso de construcción individual y grupal han desarrollado las herramientas necesarias para adaptarse al medio que les rodea, en este sentido, las personas necesitan desenvolverse a la par con otros seres y es en ese proceso que se presentan confrontaciones las cuales la gran mayoría de las veces se resuelven por medio de la agresión y la violencia, es ahí donde el conflicto se convierte en algo cotidiano inherente al hecho de ser humanos.

Ahora bien, si el conflicto es inherente a los sujetos, ¿por qué resolverlo mediante de la violencia?, ¿es la violencia un imaginario al que se acude cada vez que se presenta un problema?, ¿Se puede modificar el imaginario de la guerra y la violencia por la edificación de uno en el que la paz sea el ideal?, de acuerdo a lo anterior, y pensando en el desarrollo de una sociedad , es importante solucionarlo a través del diálogo y la negociación como estrategias que permitan un crecimiento personal y social en el que la diferencia y la diversidad sean el eje que implante un nuevo concepto de sociedad y de sujeto.

La pluralidad debe ser entendida como todo aquello que siendo distinto a mí no debe ser acabado ni mucho menos destruido, por el contrario lo disímil debe ser el eje fundante de un nuevo concepto de sociedad, de ese modo hay muchas maneras de entender la paz; esta tiene que ver con el fin de la guerra, bien sea por el camino de la negociación o por vía de la derrota militar y la rendición. Paz tiene que ver con bienestar social, con justicia y democracia, tiene que ver con la tranquilidad del espíritu. Paz tiene que ver con una relación armónica con la naturaleza.

En una sociedad tan violenta y convulsionada como la nuestra es difícil hablar de paz ya que sin lugar a dudas esta es una actitud tan individual que puede llegar a chocar con la concepciones de cada uno de los que vivimos en esta realidad. Por eso cada uno de los que conforman la sociedad deben entender y comprender que el otro no es enemigo, sino por el contrario un opositor totalmente valido que posee los mismos sentimientos, maneras de ser y de afrontar el mundo.

Aceptar la diferencia, entonces se transforma en el eje por medio de la cual se edifica una nueva sociedad, una agrupación en la que los que participan en ella desarrollan habilidades como la tolerancia y el respeto las cuales encausan una nueva perspectiva en la que la armonía es el eje y al mismo tiempo genera una convivencia sana, duradera, que perdure en el tiempo y que sea el fin del accionar de todos y cada uno de los que hacemos parte de este planeta.

Es así como la paz debe ser un ejercicio cotidiano, una manera de ver e interiorizar el mundo donde el fortalecimiento de los valores morales sean el ideal, cualidades como la tolerancia el respeto, la aceptación de la diferencia sean lo posible, es un ejercicio que se debe practicar a diario en, pocas palabras debe hablarse en este sentido de una cultura de paz ligada a la construcción de un futuro en el que todos los que hacemos parte de esta sociedad seamos seres íntegros capaces de construir un futuro en el que la violencia no sea el ideal, sino que por el contrario el conflicto sea una salida de reconstrucción individual.

La paz debe partir del entendimiento de que no somos únicos, por el contrario somos diversos y es en esa diversidad que somos verdaderamente humanos, pero la paz debe ser también un ejercicio individual en el que cada uno sea consiente de que no es perfecto, sino por el contrario posee defectos y virtudes iguales o parecidos a los de los demás, es así como la paz debe estar ligada al reconocimiento individual, en la medida que yo este en paz conmigo mismo podre estarlo con los demás, por ende la paz parte del interior de cada uno y se proyecta en forma de acciones y valores hacia los demás.

En este contexto la dinámica social es ajena a dicha realidad, los que hacemos parte de esta colectividad estamos enfrentados todos los días a situaciones que no hacen posible el ejercicio de la paz, situaciones violentas y conflictivas son el pan de cada día, es así que con el ánimo de fortalecer sentimientos de convivencia pacífica las personas deben emprender campañas en la que la paz sea posible, la reconciliación debe orientar el actuar de los sujetos y el perdón debe ser la bitácora por medio de la cual se guíen temperamentos y conductas, solo de esa manera se llegara verdaderamente a la paz teniendo en cuenta que no hay caminos para la paz sino la paz es el camino.

SI QUIERES PAZ PREPARATE PARA ELLA ES DECIR, RECONOCE Y POTENCIALIZA DENTRO DE TI REALIDADES DE PAZ, SOLO DE ESA MANERA HAREMOS QUE NUESTRA SOCIEDAD Y NUESTRA CONVIVENCIA CREZCA

HECTOR ELIECER RINCON CANO
DOCENTE DE CIENCIAS SOCIALES
UNIVERSIDAD DISTRITAL “FRANCISCO JODE DE CALDAS”