En la actualidad la sociedad está sumergida sin tener plena conciencia de ello en una revolución tecnocientífíca, esta revolución ha producido importantes cambios en la práctica científica, en su organización y en como esta se relaciona con la sociedad y la cultura que impacta de forma directa. La idea de ciencia se ha transformado gracias a los cambios sociales y económicos, la práctica de la ciencia dejo de ser parte de una comunidad científica alejada de la sociedad para convertirse en una práctica que interviene de forma directa en nuestro diario vivir.
La ciencia se ha convertido entonces en tecnociencia generando una nueva forma de entender el concepto de ciencia Vs tecnología y la práctica de estas, el ejercicio de la actividad científica ha cambiado al pasar de los siglos dejo de ser una actividad de unos pocos hombres y mujeres aislados del mundo tratando de entenderlo a una actividad que ubica al científico (a) en el centro de los principales dilemas que hoy inquietan a la sociedad.
Existen diferentes aspectos que nos permiten evaluar la evolución que presentado la práctica científica en nuestro siglo, algunos de ellos son:La financiación gubernamental, este aspecto hace referencia a la forma en la que el ejercicio científico en la actualidad se encuentra profundamente ligado a la financiación gubernamental para su supervivencia y de cómo esta situación condiciona el curso de la investigaciones respondiendo a los intereses políticos y económicos.
La integración de científicos y tecnólogos, actualmente el desarrollo de la ciencia está completamente ligado a los avances tecnológicos, la ciencia está al servicio de la tecnología para fomentar el crecimiento de la última. El contrato social de la ciencia, la investigación científica paso a ser parte de la industria de Investigación & Desarrollo (I + D), exigiendo a los científicos y las industrias que se dedicaran a hacer ciencia con estándares de competencia y eficacia industrial. La política científica, la creación de políticas dirigidas a fomentar dentro del programa de I+D el desarrollo científico, la creación de instituciones estales que coordinen la financiación y la aprobación de las investigaciones científicas que se consideren viables y no viables.
La ciencia industrializada, la actividad científica al servicio de las grandes industrias en los países más desarrollados donde la investigación científica debe ajustarse a las exigencias del mercado y de quien la patrocina. La ciencia militarizada, la practica científica bajo el dominio de la industria militar, el sometimiento de esta a las exigencias del mercado bélico, en algunos momentos de la historia la guerra ha sido el principal motor de desarrollo científico. La tecnociencia también ha permeado campos tan distantes como el arte y la literatura , haciendo parte de una realidad que es imposible rehuir y por lo tanto se hace necesario retratarla e involucrarla en la idea que hoy tenemos de humanidad y de individuo.
La paulatina irrupción y consolidación de la tecnociencia ha cambiado radicalmente la relación de esta con la sociedad al haberse producido una crisis de confianza de los ciudadanos en la investigación tecnocientífíca cuando reconoce su poder y los fuertes efectos que pude generar en la humanidad cuando está en las manos equivocadas. Aunque nos cueste trabajo en la actualidad imaginarnos nuestra vida en este planeta sin todo lo que ha generado la tecnociencia, sin los “avances” que le otorgamos, es una necesidad revaluar el camino que hemos hecho hasta ahora y el que nos falta por hacer, la utilidad de la investigación científica es incuestionable lo que hay que repensar es como repercute está en nuestras vida cotidiana y como entendemos esos efectos en la sociedad y el ambiente en el que crecemos, lo que hoy significa un problema ambiental de gran envergadura el manejo de los residuos y de los procesos que implica la tecnociencia.
La práctica científica a lo largo de la historia ha suscitado grandes debates, inicialmente en sus formas y métodos y actualmente en sus resultados, la sociedad se hace mas critica ante las supuestas soluciones definitivas que pretende ofrecer la ciencia y la tecnociencia. La complejidad en los conflictos de valores que se presentan cuando se desea hacer una evaluación al que hacer tecnocientífico hace que la tarea se vea monumental, ya que se combina una pluralidad de valores y de agentes que evalúan haciendo casi imposible llegar a un veredicto único respecto a si la tecnociencia es buena o mala para la sociedad. Y es en esta ultima donde la tecnociencia tiene su aplicación, por lo tanto no se debe separar la actividad
tecnocientífíca de la sociedad por más lejana que esta le suene al hombre común en la actualidad se hace cada vez más necesario la generación de debates frente a la aceptabilidad de la tecnociencia y de los conflictos que este genera. La utilización de los artefactos que ofrece la tecnociencia da nuevas posibilidades de acción que sin duda traen consecuencias sobre el medio en que actúa, en algunos casos la actividad científica en algunos países se pone al servicio del poder militar para fines bélicos, ya la historia nos ha demostrado que esta relación resulta catastrófica cuando se sale de control.
Es necesario y urgente que como sociedad abramos un camino de reflexión ante las implicaciones de la tecnociencia en la historia de la humanidad, en el desarrollo de las sociedades y en la cotidianidad del individuo , nuestra realidad nos convoca a un trabajo individual que corroe todo lo que hoy se consideraba como supuestos inamovibles, un trabajo critico frente a nuestra propia forma de “consumir y entender ” la tecnociencia y a nuestra forma de contribuir con la misma , de cómo nos relacionamos desde nuestra individualidad con el complejo mundo que nos ofrecen los avances tecnocientíficos.
Autor:Diana Marcela Toledo valencia.