Cómo aliviar el reflujo y la acidez estomacal

Cuando se habla de reflujo y acidez estomacal se refiere a la enfermedad y el síntoma, más específicamente se trata de reflujo gastroesofágico, esa condición en la que los jugos gástricos se devuelven del estómago hacia el esófago, causando acidez gástrica y ardor a la altura del pecho. Esto ocurre normalmente luego de las comidas, y algunos ingredientes son conocidos por empeorar el reflujo estomacal. La causa principal para padecer reflujo es alguna falla en la válvula que separa el estómago del esófago, de manera que, comidas que propicien el relajamiento del esfínter esofágico y que sean de alta acidez empeorarán la intensidad del estado.

El primer aspecto que debe quedar aclarado es que muchos ingredientes que son ácidos al gusto, no necesariamente afectan el reflujo; esto se debe a que el pH de estos alimentos no es ácido, al contrario, consumir limón en pequeñas dosis (sobre con agua caliente, es un digestivo natural para después de comer) puede ayudar a bajar y controlar el pH del cuerpo, por ende, reducir la incidencia de este padecimiento; no obstante, si sufres de gastritis no es recomendado tomar jugo de limón, naranja, o cualquier otra fruta cítrica, con el estómago vacío. En general, la mejor manera de afrontar y superar problemas estomacales como acidez y reflujo, consiste en realizar cambios radicales en los hábitos alimenticios y estilo de vida personal. Veamos a fondo a que se refieren estos cambios.

Comidas desencadenantes

Los alimentos que suelen propiciar la acidez y el reflujo son varios, sin embargo cada organismo actúa de forma distinta, y descubrir qué alimentos te caen mal dependerá de un esfuerzo personal, ensayo y error. Entre los ingredientes que se deben evitar destacan el té, el café, frutas cítricas, alcohol, tomates, cebollas, ajos, chocolate, leche, menta, comidas con alto contenido graso, comidas picantes y muy condimentadas, cremas y caldos enlatados, gaseosas, bebidas carbonatadas, bebidas azucaradas, y la mayoría de las comidas rápidas, son todos alimentos comunes que pueden desatar acidez y reflujo en personas delicadas.

Mejores opciones alimenticias

Optar por comidas naturales, frescas, bajas en grasas y hechas en casa son los puntos claves para mejorar la acidez y el reflujo. Existen ingredientes que pueden contribuir al descenso de los síntomas que se presentan, como el ardor en el pecho y el estómago, la sensación de estar repitiendo la comida, los gases y la hinchazón estomacal. Los vegetales de hojas verdes, como la lechuga, rúcula, radicchio, espárragos, apio españa, pepino, son todos ricos en vitaminas y minerales, pero también al ser ricos en fibra mejoran la digestión y previenen el reflujo. Igualmente el jengibre, el cual es un anti-inflamatorio y una medicina ancestral utilizada para problemas gastrointestinales, promueve la salud estomacal y ayuda contra los síntomas del reflujo y la acidez. El vinagre de sidra de manzana es un ingrediente utilizado como remedio casero para la acidez causada por el reflujo, sólo debes tomar una cucharadita después de las comida, o utilizarlo regularmente como aderezo para tus ensaladas.

Otros ingredientes que pueden ayudarte a desarrollar una dieta acorde para disminuir la incidencia y prevenir la condición de reflujo podrían ser la avena, frutas con pH alcalinos como las bananas, melón, sandía, papaya, las carnes magras, y los granos completos.

Estilo de vida

Conviene también aprender mejores hábitos para tu vida diaria, la siguiente lista contiene cambios sencillos que puedes empezar inmediatamente, que ayudarán a evitar completamente los síntomas de reflujo:

  • Come con mayor frecuencia. Es mejor repartir seis o siete comidas a lo largo del día, que comer en exceso una sola vez al día.
  • Come más despacio. Ocúpate de masticar bien lo que comes y respirar entre cada bocado. Esto ayuda a una mejor digestión.
  • Evita cenar tarde. Come con un plazo de dos o tres horas de descanso antes de acostarte a dormir.
  • Cocina en casa. Evita comidas procesadas, muy condimentadas, y fritas, como la comida rápida o comida enlatada.
  • Investiga y prueba con una dieta baja en ácidos. Aprende una alimentación inteligente, imprime en tu cocina una tabla con el pH de los alimentos.
  • Evita comer en exceso. Embotarte de comida en una sola sentada provocará irremediablemente que padezcas de sensaciones de acidez y reflujo.
  • Elimina el alcohol, los cigarrillos, y bocadillos de medianoche (más aún si su contenido es alto en grasas y azúcares)
  • Experimenta con remedios caseros.
  • Siempre lleva una fruta para merendar contigo adonde vayas.