El método de la educación básica (primaria-secundaria), enfocada al niño, a la niña y al adolescente, a lo largo de un gran periodo de tiempo, a pesar de estar consciente en la importancia de formar ciudadanos a través de métodos medievales de enseñanza, jamás tuvo en consideración la importancia y relevancia que ella misma conlleva en la adecuada formación, desarrollo, estructuración e importancia en el desenvolvimiento a futuro de los menores de edad, como un ser humano íntegro y que se adapte a las realidades de un mundo globalizado hasta épocas recientes. Código de la Infancia «en el que se tiene en cuenta los derechos y la protección del niño, niña y adolescente, poniendo al país a tono con los preceptos internacionales sobre el tema. La educación es la base de la sociedad, entendida por la Real Academia de la Lengua, como «
la acción y efecto de educar«, «crianza, enseñanza y doctrina que se da a los niños y a los jóvenes«, «cortesía y urbanidad«, ello implica que es la manera de construir cohesión social, en lo que se ha entendido actualmente como un entorno basado en la competitividad, pero en su esencia es mantener la igualdad de oportunidades de acceder a distintas esferas de la vida y crear una conciencia social.
Leyes como la 115 de 1994, la cual regula la educación en Colombia, es una disposición que está basada en los principios constitucionales, además de la filosofía de que el ser humano debe tener una vida digna, y para lograr llegar a esta, es importante el aprendizaje, mediante diversas estrategias y métodos pedagógicos. Es tan importante este derecho y esta institución, que la educación debe brindarse de manera gratuita por parte del Estado, además, este tiene la obligación de inspeccionar y vigilar la educación para que este servicio-derecho sea impartido con una gran calidad, fomentando así el desarrollo del estudiante, plena e integralmente.
Un tema a tener en cuenta, y que todavía parece ser pasado por alto por la sociedad en general, en especial por los sectores de escasos recursos, es el impacto y la influencia que tiene la educación y la formación psico-social en los menores de 7 años. Es demostrado por varios estudios, que cuando no existe una correcta formación, estimulación y educación en ese tiempo que transcurre hasta la edad en mención, ese menor tendrá dificultades en su vida adulta en Página todos los niveles y áreas sociales, además de estabilidad mental. Por lo que se hace necesario tener dos objetivos de manera constante; en primer lugar, lograr un acceso total de los menores de edad a la educación básica; en segundo lugar, encontrar y aplicar mecanismos o estrategias de enseñanza pedagógica que logren estimular el proceso de formación educativa y su formación personal.
La familia, la sociedad, y el Estado tienen la obligación de proteger al niño, niña y adolescente en cada uno de los momentos en que este se va desarrollando como persona, todo aquello que lo constituye como ser humano y lo hace perteneciente a un núcleo social, lo psicológico, lo fisiológico, lo cultural y lo cognitivo del menor. Es gracias a la constitución y tratados internacionales que es importante resaltar que los derechos del menor prevalecen sobre los derechos de los demás y que el derecho a la educación debe impartirse con calidad, eficiencia y eficacia.
La familia, grupo de personas vinculadas por la sangre o por la ley, juega un papel esencial en la formación del menor, obra según la constitución como el núcleo fundamental de la sociedad, son las primeras personas más cercanas al niño o niña. Tiene la obligación y el deber de brindar todo el soporte y protección primaria al menor, seguidamente son quienes estimulan los primeros pasos al infante en distintas esferas de su vida, en el tema en cuestión, son quienes logran que exista un afecto al estudio, quienes inculcan el interés por seguir aprendiendo (ya que la curiosidad es innata a todo humano), además son el apoyo y quienes colaboran a entender e interpretar cada experiencia nueva de su entorno.
Posteriormente, se encuentra la comunidad o sociedad, reflejo de la suma de las familias (en el sentido más amplio), esta tiene en igual forma, obligaciones para con el menor, pues en esencia su mayor deber es la protección y la abstención de infringir cualquier daño, además debe tener para con todos, en especial del menor, un trato basado en la dignidad humana, estimulando la comprensión, la tolerancia y el respeto por todos los derechos humanos.
Por último, se encuentra el Estado, persona jurídica que obra como el mayor garante de la protección al menor y a los ciudadanos, además es quien debe fomentar estrategias y políticas para que el derecho de la educación se materialice, exista acceso, permanencia y sea gratuito, por lo menos al nivel básico, e igualitario para todos, siempre con el propósito de mejorar la calidad de la educación, estimulando el progreso, el desarrollo, y se dé la enseñanza por medio de adecuados métodos pedagógicos, apoyando en igual manera la formación, la capacitación y la implementación de los docentes.
Escritor: JOSÉ RICARDO RUIZ ABADÍA