EVALUACION DEL CUMPLIMIENTO DEL MANEJO DE RESIDUOS ORGANICOS E INORGANICOS E IMPLEMENTACION DE BUENAS PRACTICAS PECUARIAS EN VIAS DEL PROCESO DE CERTIFICACION DE UNA EMPRESA PORCICOLA – 3 parte –

La empresa Granjas Paraíso ubicada  sobre la recta  Cali-Palmira km 12 en el Valle del Cauca ha venido trabajando hace más de seis años en los procesos de minimización del impacto ambiental que genera la explotación porcícola. Sin embargo, la situación geográfica de la granja, ubicada casi sobre una vía pública ha generado incomodidad a la población aledaña por la generación de olores ofensivos debido al  inadecuado manejo de excretas porcinas y también por  el aumento en la producción de cerdos, debido a la estandarización de procesos a la que se sometió hace mas de 8 años donde optimizó su parte productiva. La problemática se basa en el aumento de excretas porcinas y el sistema de limpieza de estiércol de los corrales con agua a presión, el cual genera mayor cantidad de excretas líquidas, mayor gasto del recurso hídrico y mayor concentración de amonio en el ambiente. También como parte de las normativas para el proceso de certificación de las buenas prácticas pecuarias, no se ha tenido continuidad en el manejo adecuado de los desechos inorgánicos como lo son frascos de vacunas y antibióticos, jeringas, agujas y todo lo que interviene durante un proceso de manejo zootécnico.

En la medida en que las explotaciones han ido creciendo y concentrándose en ciertas regiones del país han surgido algunos inconvenientes con el manejo de los residuos generados. Estos residuos pueden ser de tipo orgánico (estiércol sólido o fresco y animales muertos) o inorgánicos (jeringas, envase de biológicos, frascos, empaques, etc.). Pero sin lugar a dudas uno de los residuos que genera mayor controversia es la excreta porcina debido al volumen generado a sus características físico-químicas que dificultan su manejo, y como un potencial contaminante de agua.[1]

Lo anteriormente expuesto nos dirige hacia el análisis por separado de las posibles alternativas de tratamiento para los desechos sólidos y líquidos.

Una de las alternativas más utilizadas en el tratamiento de los residuales líquidos es la utilización de lagunas. La mayoría de las industrias porcinas a gran escala poseen lagunas de tratamiento para el agua residual, que son diseñadas con el objetivo de cumplir tres funciones específicas:[2]

1. Aportar una población de bacterias anaerobias que descomponen la materia orgánica residual en productos finales más fácilmente manejables.[3]

2. Proporcionar un área de almacenamiento para acumular las excretas tratadas y parcialmente tratadas hasta el momento en que sea conveniente, o económicamente productiva su aplicación a las tierras de cultivo.[4]

3. Facilitar los medios para capturar y almacenar el agua contaminada que pueda generarse por la precipitación de superficies contaminadas con excretas que puedan estar fuera de las áreas de tratamiento.[5]

El uso de lagunas puede tener el inconveniente potencial de generar contaminación a través del desbordamiento de las mismas, o si el contenido de las lagunas es drenado intencionalmente a las fuentes de agua.

La impermeabilización inadecuada de las lagunas también es una posibilidad de contaminación de los acuíferos subterráneos, o bien, mediante la aplicación excesiva del efluente a las tierras de cultivo, aplicando mayor cantidad de nitrógeno del que pueda ser utilizado por los cultivos. Sin dudas, la solución más sencilla y en principio la menos costosa es la aplicación del agua residual en los cultivos, o la utilización agrícola de las excretas y en este caso, se debe considerar lo siguiente:[6]

1. Aplicar el agua residual a la velocidad que el suelo es capaz de absorber sus nutrientes, considerando las características físicas y químicas del suelo y la precipitación tanto en cantidad como en intensidad.[7]

2. Aplicar el agua residual en cantidades que se aproximen a la velocidad en que los cultivos son capaces de reciclar los nutrientes, considerando los requerimientos del cultivo, de acuerdo con su etapa fenológica.[8]

La concentración de nutrientes en las aguas de la laguna presenta una alta variabilidad tanto temporal como espacial debido a la heterogeneidad de las aguas dadas por la sedimentación. Por tanto, la determinación de la cantidad de agua residual que se puede aplicar a un cultivo es muy compleja, por lo que es conveniente realizar un análisis previo a la aplicación para determinar el contenido de N, P y K . El contenido de nutrientes en las excretas y en el agua residual es altamente variable y su concentración dependerá en última instancia de la cantidad de agua utilizada en la granja para la limpieza de las instalaciones y el enfriamiento de los animales.



[1] RESOLUCIÓN No 921, Por medio de la cual se justifica una contratación directa. En línea: http://www.contratos.gov.co/archivospuc1/2010/DA/132001006/10-12-409233/DA_PROCESO_10-12-409233_132001006_2119441.pdf

[2] ROBERTO Sanginés. Uso del agua residual generada en las granjas porcinas para la producción del forraje. En línea: http://www.sian.info.ve/porcinos/publicaciones/simposio/7sangines.pdf

[3] Ibid. Pág 12

[4] Ibid. Pág12

[5]  Ibid Pág 12

[6] ROBERTO Sanginés. Uso del agua residual generada en las granjas porcinas para la producción del forraje. En línea: http://www.sian.info.ve/porcinos/publicaciones/simposio/7sangines.pdf

[7] Ibid

[8] Ibid

Autor:

ANDRE CASTILLA GUTIERREZ