El proceso de enseñanza aprendizaje, es un proceso cohesionado entre el maestro y el niño que involucra experiencias significativas que van en busca de una formación integral en miras de transformar la sociedad atraves del niño. La escuela encierra unos paradigmas que convierten al niño en un objeto para moldear, que están ajenos a los intereses de estos. Uno de estos grandes problemas es lo relacionado con lo ético; es decir, en busca de la perfección. La escuela se ha limitado a formar a sus alumnos de acuerdo a la normativa del estado, desaparece la igualdad de la educación, clasifica los comportamientos emocionales del niño y los trata de acuerdo a ellos.
Por otra parte, el trabajo pedagógico es otra modalidad cuestionable del quehacer del maestro. En muchas ocasiones muchos problemas de enseñanza son presentados como problemas de aprendizaje. La escuela se ha centrado en formar al niño bajo la guía curricular manifestando alto interés en la etapa de la lectoescritura a partir de edades tempranas donde el niño no ha alcanzado la suficiente madurez cognitiva para asimilar tanta información; olvidándose que el niño necesita desarrollar sus etapas de juego donde por el contrario, alcanza un desarrollo físico- motriz que a su vez facilita el aprendizaje.
Desde este punto de vista y resaltando la importancia del juego en la educación de los niños; se hace necesario que durante la básica primaria, el maestro utilice esta estrategia metodológica para cualquier tipo de aprendizaje que le interese transmitir; ya que el juego por su esencia, permite una asimilación correcta de la información trasmitida y así mismo proporciona un ambiente agradable y el logro de los objetivos propuestos por el docente.
Debido a lo planteado anteriormente en relación al juego; nace la importancia del cuerpo en la escuela, en la medida de que el maestro en su quehacer pedagógico reconozca que el cuerpo tiene la capacidad de expresar los diversos estados anímicos de los estudiantes, los cuales están influenciados por agentes ambientales y sociales que permiten a los mismos, dejar hablar su cuerpo y establecer un diálogo entre él, los otros y su entorno. La visibilización del cuerpo en la escuela podría posibilitar al maestro en la relación con sus estudiantes, inculcarles la importancia que tiene su cuerpo como medio expresivo y que no se limite únicamente a las características anatómicas y fisiológicas. Por tanto, la invitación es a observar todas aquellas manifestaciones que el niño hace con su cuerpo, desde las más expresivas hasta las menos notorias, para así construir un concepto de cuerpo en la escuela orientado por actividades lúdicas.
Por otra parte, la escuela ha permitido que sus docentes limiten su enseñanza los requerimientos del area, por lo tanto se convierte en un ente irresponsable que forma los niños en áreas especificas, olvidándose de los valores, actitudes y fortalezas que encierra ese niño y que solo se necesita de buenos maestros que estén dispuestos a enseñar y aprender de su labor; haciendo de esta un proceso articulado que promueva la investigación y certifique la calidad de la educación. En síntesis, a partir de la formación física-motriz, que se imparte en la escuela en el area de educación física, se necesita de profesores capacitados que permanentemente estén actualizando sus conocimientos específicos del área y que permitan formar al niño (de acuerdo a su edad) en el desarrollo de sus habilidades y capacidades físicas. Que potencialicen y orienten al niño a elegir una modalidad deportiva según su interés o según sus condiciones físicas innatas o adquiridas, que solo pueden ser evidenciadas por un buen profesor de educación física, quien es el primer veedor de estas cualidades físico-motrices atraves de la escuela.
En esta medida; es preocupante escuchar, que el Estado hable de calidad de la Educación y se le reste importancia al área de educación física y esta sea considerada por muchos como área de relleno, desconociendo su importancia en los primeros grados escolares que es donde se debe estimular el desarrollo de las habilidades motrices en los niños. Por tal motivo, como docente de educación física y como doliente de la problemática educativa que se vive en la actualidad, pongo de manifiesto que este área no se centra únicamente en el deporte (como se denomina hoy en día) sino que una disciplina transversal que incide directamente en la formación integral del individuo.
Escritor: Lilia Janeth Palacios Valderrama