LA INCURSIÓN DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS EN EL ESPACIO EDUCATIVO

Que haya políticas y programas que busquen integrar las nuevas tecnologías de la información y la comunicación al aula no es algo que suene mal, pero de ahí a que esa incursión esté logrando un cambio significativo, positivo y social hay una gran brecha. Es de conocimiento público el gran impacto que estas tecnologías están causando en las familias, mayormente en los niños, niñas y jóvenes de nuestra sociedad, cada vez hay mayor número de familias con computadoras y conexiones de internet, tablets, ipad, entre otros, incluso la escuela no se quiere quedar atrás y está en camino a la conectividad y la enseñanza desde esta, pero no creo sea posible afirmar una transformación positiva, no solo en cuanto al manejo de estas, sino a su buen uso, con vías al fortalecimiento del pensamiento crítico, creativo, reflexivo y social y con miras a la participación ciudadana y a la emancipación.

¿Por qué sucede esto? ¿Es suficiente con el incluir una computadora en la escuela para lograr una educación de calidad? ¿Qué hace falta? en nuestra sociedad está cada vez cumpliendo menos sus fines, los cuales son buscar, tomar decisiones y actuar en pro del bien común, y por el otro, nos abordan las políticas neoliberales y es aquí donde entra la economía a hacer de las suyas, el mercado es el que gobierna y el que prácticamente toma las decisiones en el país, está continuamente en busca de nuevas formas de comercio y han encontrado en los niños, niñas y jóvenes lo que necesitaban, sujetos de consumo ¿o más bien objetos?.

Así, el mercado se está aprovechando de dos importantes sucesos en la época, por un lado tenemos el surgimiento y saturación de nuevas tecnologías, las cuales están siendo usadas por la juventud, quienes están definiendo sus identidades a partir de estas, de la cantidad de información y de la creación de nuevas culturas, y por otro lado, contamos con la importancia dada a la educación, algunos movimientos y organizaciones en el país han entendido que la mejor forma de resolver todo tipo de problemática social, económica, moral y cultural es mediante una educación con cobertura y de calidad donde además se promueva la permanencia y la inclusión.

Es de esta manera que el mercado debe convencer a todos que contar en los hogares y las escuelas con las nuevas tecnologías es la mejor opción, ahora bien, ¿opción para qué? ¿Para sus intereses económicos? Con todo esto no pretendo dirimir la importancia que tienen las TIC en el aula con fines educativos, pero si vemos nuestro contexto, no creo que actualmente se hayan construido esos fines y por lo tanto no se están promoviendo.

Muchos padres y madres convencidos de la utilidad educativa de las computadoras han accedido a ellas, pero están viendo que sus hijos no las están utilizando como esperaban, en internet no encuentran mas que las famosas “redes sociales”, los chats, música, películas y juegos online, pero de educativo, nada, el lenguaje es cada vez más empobrecido y se puede decir que internet está siendo utilizado para banalidades. De otro lado, los maestros no estamos siendo capacitados como debería ser, sentimos temor al enfrentarnos al uso de las nuevas tecnologías incluso no sabemos sacar provecho de estas y terminamos llevando a los estudiantes a la sala de informática para que estos hagan lo que quieran, sin una orientación pedagógica, o del otro extremo, solo cambiamos los libros por pantallas y pedimos que hagan búsquedas sin darles mayor información.

Ahora, para terminar, ¿qué es lo que se necesita, entonces? La respuesta es sencilla, la unión de sociedad-escuela-Estado, y para esto se requiere el uso del lenguaje, tener claro qué es lo que se busca con las nuevas tecnologías, cuáles son los fines educativos, tomar en cuenta los intereses de los niños, niñas y jóvenes sin perder de vista lo pedagógico, promover la capacitación docente y lograr que esta triada asuma como suyo el compromiso educativo con las nuevas generaciones. Sin más que decir, es necesaria la mediación del lenguaje en toda la sociedad para que se pueda pensar en un futuro, construido por los hoy niños y niñas, donde la violencia no sea necesaria y se encuentre en el diálogo la solución a las dificultades.

Escritor: Viviana Milena Escobar Cardona