¿ Sabía usted que actualmente en el mundo, la sumatoria de los usuarios que utilizan las cuatro principales redes sociales (Facebook, Twitter, YouTube y Google) supera los 2.700 millones de personas?. Impresionante…!!, ¿no es así?. Si nos remontáramos a principios de los años 90, la verdad es que resultaría impensado pretender tal nivel de conectividad e interacción entre personas de distintas latitudes del planeta. Para ese entonces , ya era demasiado novedoso sólo poder oír ese característico “beep” cuando una persona era notificada por medio de un mensaje de texto, enviado directamente a un dispositivo portátil llamado “Beeper”.
Desde luego, el disponer de esta maravilla tecnológica estaba acotado a un número reducido de la población , siendo utilizado generalmente por profesionales, que por las características de sus funciones, necesitaban estar en contacto más directo con su base de trabajo. ahora carecía de sentido. En un comienzo, por ser el teléfono celular una herramienta que a claras luces evidenciaba prestar una utilidad enorme, esto lo hacía un producto muy atractivo, pero a la vez, esquivo para el presupuesto del ciudadano de clase media . Se subentendía entonces, en la mayoría de los casos, que quien portaba uno de estos equipos era una persona que gozaba de cierta holgura económica.
Hoy podemos ver a niños de 10 años (o menos) con su teléfono celular de última generación, incluyendo por supuesto, todas las aplicaciones para juegos de alta complejidad gráfica , gran capacidad para almacenamiento de datos, tales como archivos de música ,imágenes, películas, conectividad a funciones simultáneas ,etc,etc,etc. Evidentemente, basta con citar sólo un par de ejemplos para darnos cuenta del avance descomunal que ha tenido la tecnología de las comunicaciones , en todo su espectro , dentro de los últimos años. Antiguamente sólo se lograba saber lo que ocurría en el resto del mundo a través de la televisión, la radio o la prensa escrita ; obviamente , sólo las noticias más relevantes consideradas como tales. Menos probable era aun pensar mantener un contacto relativamente fluido con alguien que viviera o estuviera en otro país, siendo el servicio de correspondencia (correo) la única alternativa a considerar, lo que desde luego asumía para el remitente que dicha carta podría tardar por lo menos un par semanas antes de llegar a su destinatario. Debido a los costes, para la mayoría de la gente, las llamadas internacionales por medio de la telefonía de red fija prácticamente no eran una opción.
En fin, hasta este punto sólo hemos hecho historia respecto al avance y evolución de la tecnología de las comunicaciones . Es muy probable que si algún joven lector de entre 15 a 20 años de edad se encuentra frente a frente con este escrito, no resultaría extraño que el contenido “histórico” de este artículo le provocara la sensación de que se está hablando de antecedentes recabados desde hace muchos años atrás, con una larga data, pero en realidad no es así…es sólo una historia que se ha desarrollado cronológicamente en paralelo a los mismos años de vida de este joven lector.
Es así como hoy en día las redes sociales tales como Facebook , por ejemplo, han logrado captar tal cantidad de adeptos alrededor de todo el mundo , logrando un éxito sin precedentes. Y no podría ser distinto , si permite estar en contacto con tantas personas a la vez. Eso sí, paso obligado para todo aquel que quiera ser parte de esta comunidad , es comenzar asociar y manejar nuevos términos , tales como: “Chatear” , “Muro” , “Post” , “Agregar “ , “Bloquear” , “Seguir”, “Dar un toque”, etc.
Es innegable que la tecnología ha logrado hacer de nuestro mundo una “Gran Aldea” , y para quienes han vivido desde cuatro décadas hacia arriba, deben reconocer que están frente a otra concepción de las cosas, desde el punto de vista de la lejanía con que antes se percibía el hecho de dar una mirada hacia otros países o continentes. Gracias al inmensurable desarrollo de la tecnología de las comunicaciones, el mundo está claramente mucho más “Estandarizado“.
en la realidad cotidiana de cada familia, no es menos cierto que el estar conectados prácticamente todo el día , y hasta altas horas de la madrugada , también ha traído sus consecuencias . Podemos ver por ejemplo, a muchos adolescentes que tienen acceso a Internet a través de sus teléfonos celulares , lo que ha provocado tal adicción a estar pendientes de una pantalla, que lamentablemente se ha ido perdiendo la comunicación familiar más y más. Por supuesto, esto no sólo ocurre con los adolescentes, la verdad es que pasa con personas de distintas edades. Sólo que dentro de este grupo etáreo es una tendencia claramente marcada.
No es novedad ir a la casa de algún familiar o conocido, y darse cuenta que sus hijos están prácticamente hipnotizados frente a una pantalla de un celular, tablet o un computador. Ya quisiéramos saber qué es lo que logra captar tanto su atención . Cualquiera pensaría que se trata de una noticia que cambiará el curso de su vida, pero no ; la mayoría de las veces son noticias tan profundas como ver una foto que un amigo le tomó a su plato de comida , otra amiga publicó que se enojó con su novio , alguien más escribe que tiene sueño y que se fue a dormir,etc.
Pareciera una crítica a cómo se manejan las redes sociales en este sentido, pero la verdad es que no es así. Estas son las reglas del juego y cada uno sabe como se mueve dentro de este “Universo”. El meollo de esta apelación final es que podamos distribuir de mejor manera nuestro tiempo. Si queremos lograr una sociedad mucho más desarrollada y comunicada, no podemos “desconectarnos” de quienes tenemos a nuestro lado todos los días: Nuestra familia.
Autor: Pedro Espinoza B.