Con un tamaño muy pequeño medido en nanogramos, invisibles al ojo humano y a la mayoría de microscopios hasta ahora fabricados, ubicados en la frontera entre lo vivo y lo muerto y sin la capacidad de reproducirse por si mismos, los virus desde el principio de la historia de la tierra, han acompañado a sus hospederos; bacterias, protozoos, hongos, plantas y animales, ninguno se ha salvado de convivir con estos molestos visitantes. Hasta el hombre con su egocentrismo y su creencia de ser la criatura más importante y especial del universo, se ha visto afectado de una manera muy directa con la existencia de estos microorganismos, si es que así se pueden llamar.
Existen datos desde la época del resplandor de la civilización egipcia de la existencia de los virus, en una imagen de esa época se logra observar a un faraón con una pierna mucho mas delgada que la otra, uno de las consecuencias mas características de la poliomielitis, causada por la infección con los Poliovirus. Más recientemente, a partir del siglo 19, comenzó el interés por estudiar estos “bichos” que podían filtrarse a través de membranas, por las cuales ni las bacterias que eran los microorganismos más pequeños conocidos hasta el momento lo podían hacer. A partir de muchos estudios realizados desde esta época se han podido descubrir y reconocer mas de 23 familias de virus, dentro de las cuales hay como mínimo un genero y aun así existen todavía agentes virales para los cuales no se ha logrado una clasificación; esto proporciona una gran variedad de virus, todos con capacidad de infectar al resto de organismos vivientes y con tropismos muy definidos.
Con respecto a los virus que infectan a humanos, los más estudiados por la mayoría de virólogos, también existe una amplia variedad, con tropismo por casi todos los órganos del cuerpo. Dentro de este grupo de virus se pueden mencionar algunos de los mas importantes como el virus de la influenza, el virus del dengue hemorrágico, el virus de la rabia, los papilomavirus, los herpesvirus, los virus de las hepatitis A, B, C, D y E y uno de los mas importantes y difíciles de erradicar; para el cual se ha tratado de crear una vacuna desde los años 80`s con resultados desalentadores, el VIH (Virus de la Inmunodeficiencia Humana), que causa el desorden conocido como SIDA (Síndrome de la Inmunodeficiencia Adquirida).
Estos virus antes mencionados han sido terroríficos para la humanidad desde hace muchos años atrás, pues han causado una gran cantidad de epidemias que en determinadas épocas han disminuido la población mundial considerablemente. Algunas de las mas importantes de estas epidemias fueron las causadas por el virus de la influenza aviar, que al recombinarse con el virus de la influenza humana, produjo una cepa letal que no pudo ser reconocida por el sistema inmune de los humanos y causo millones de muertes en el año 1918 en España, en 1956 en Corea del sur, y en el año 2009 causo también serios problemas y muchas muertes en Latinoamérica principalmente. El virus de la viruela fue otro agente infeccioso que ocasiono una gran epidemia en la Europa del siglo 16 y fue traído por los españoles a América siendo utilizado como arma biológica para combatir y robar a los nativos americanos.
No menos nocivo para la humanidad ha sido el VIH, que en los años 70`s tuvo un resplandor infectando gran cantidad de personas en Europa, América, pero principalmente en África, de donde es originario. Las personas infectadas por este virus fueron en su mayoría trabajadoras sexuales y sus clientes, hasta la implementación del condón que freno esta epidemia, pero aun así, este virus sigue infectando muchas personas afectando la salud publica mundial, y por su alta tasa de mutación va a ser muy difícil neutralizarlo por medio de vacunas; solo algún tipo de medicamentos hace mas llevadero el síndrome que este virus causa en las personas infectadas, pero por el momento tendrán que seguir conviviendo con él.
Todos estos virus tienen una ruta de transmisión, órgano blanco y estrategia de replicación distinto; pero todos cumplen con la misma misión por la cual están en la naturaleza. Esta misión es infectar una célula que posea el receptor específico para las proteínas de superficie del virus, ingresar a ella, replicar su genoma ya sea ADN o ARN y producir proteínas virales por medio de la maquinaria celular. Finalmente ensamblar todas sus proteínas y genomas en forma de viriones y salir de la célula para ir a infectar otras células y seguirse replicando hasta que el sistema inmune actué de forma natural ó alguna estrategia de respuesta externa sea implementada, como drogas específicas.
Después de cumplir esta misión, si no se toman medidas de control, muchos de estos virus pueden llegar a matar el organismo al cual infectaron. Es por esto que en la investigación biomédica se debe tener muy en cuenta el potencial de daño que pueden llegar a tener estos entes y hacer cada vez más estudios dirigidos a investigar el modo de transmisión, replicación y el desenlace de las enfermedades que ellos causan. Aunque ya existen vacunas y muchas drogas que atacan muchos de estos asesinos silenciosos, es imprescindible continuar con la búsqueda de nuevas medidas de control sobre todo para aquellos virus con alta capacidad de mutación que han causado grandes epidemias y se han conviertido en un problema de salud pública a nivel mundial.
Escritor: Carlos Mario Jaramillo Ospina