Modelo estrategico

En este modelo, la diferencia entre familia «normal» y familia «patológica» identifica por el distinto grado de flexibilidad que estos dos tipos de familias manifiestan frente a la necesidad de apropiarse de conductas que respondan de forma adecuada a las dificultades que debe resolver. Mientras que las primeras utilizan una vasta gama de conductas, las segundas se muestran rígidas, bloqueadas, con carencia de alternativas.

La intervención apunta a interrumpir la secuencia de realimentación que perpetúan los síntomas, para desbloquear la familia y facilitar una reorganización que se definirá independientemente del sistema en sí.