En la actualidad se presenta la disyuntiva entre cronometrar el tiempo que nuestro bebé toma de cada pecho o esperar que se encuentre satisfecho. Desde aquí como una ayuda aproximada para tomar de referencia, el tiempo promedio en el que bebé debería tomar cada pecho sería de diez a quince minutos respectivamente.
Otro método para saber que debemos cambiar a la otra mama es cuando sentimos que ya se encuentra más bien blanda, este es el momento oportuno para rotarlo hacia el otro pecho. Pero lo ideal es que el bebé marque que ha finalizando retirándose por propia decisión, más allá del tiempo transcurrido.
En caso de haber alimentado al niño de una sola mama recuerda que en la próxima toma debes ofrecerle el pecho que no haya amamantado, podrás notar que suele estar más pesado. Es esencial que tomes nota de los hábitos del bebé, ya que si en alguna ocasión se diera que no quiere el pecho o no por el tiempo en el que esta acostumbrado puede que presente una dolencia o indigestión.
de la misma manera debes estar atenta en cuanto a que tome el pecho más allá del tiempo habitual, ya que puede que se convierta en una maña y, como dicen las abuelas, tome el pecho igual que a un chupete. No dejes de consultar con el especialista, pero ten en cuenta el comportamiento de tu hijo.