Es cierto que no existe una fórmula precisa para vivir en armonía, sobre todo con aquello que nos rodea. En su mayoría, tratamos de recurrir a herramientas que, según nos parezca, pueden causar cierta satisfacción momentánea en nuestro estado emocional. Sin embargo, lo que hemos ignorado por mucho tiempo es que sí existe una manera; recomendaciones que pueden parecer obvias, pero sin su práctica habitual no se obtendrá el resultado esperado.
Invierte en tu desarrollo personal
Proyéctate, piensa en lo que quieres hacer y elabora un plan para conseguirlo. Haz ejercicio, como sano, relaciónate con personas que te enseñen algo nuevo. Busca ocupar tu tiempo libre en actividades que sean de tu agrado y estimulen tu crecimiento. Organízate, no es tan difícil si te adaptas a un método elaborado por ti.
Libérate de pensamientos tóxicos
Estar mucho tiempo a solas puede ocasionar que nuestros pensamientos se desvíen a escenarios inexistentes, materializados, muchas veces, al vernos influenciados por situaciones negativas que podemos estar viviendo al momento.
Despeja tu mente: planifica salidas a lugares recreativos, busca conversar con amigos o familiares cuando te sientas mal.
Aléjate de personas tóxicas
Es difícil identificar a quiénes no aportan buenas vibras. Estas personas tóxicas o conflictivas buscan absorbernos, sobre todo si nos ven muy tranquilos. Solemos creer que cuando llega una persona problemática, con ayudarle creamos un enlace de amistad y confianza.
No te confundas: sé selectivo con tus grupos sociales. Conoce a cuántas personas puedas y así sabrás identificar lo que es bueno para ti.
Actúa desde el SER
Conócete, si notas que hay detalles en tus acciones que debes modificar, enfócate en ellas. Confía en ti, siembra seguridad en tus quehaceres. Actúa desde tus principios y no dejes de ser tú mismo.
Pide ayuda cuando lo necesites
La respuesta parece simple, creemos que la conocemos. Hemos vivido y sabemos qué tenemos que hacer ante determinadas circunstancias. Sin embargo, un apoyo no está demás. Pedir ayuda solo nos ampliará las opciones para solventar cualquier inconveniente.
Confía en tus seres queridos
Tenemos que relacionarnos, es una necesidad. Ceder confianza es primordial. Otorgando seguridad a quienes queremos lograremos sembrar un compromiso con ellos y con nosotros mismos.
Vive rodeado de experiencias alegres
Sal, conoce lugares nuevos. No es necesario tener mucho dinero para eso.
Investiga: contacta a un grupo de amigos y emprende un viaje.
Conoce personas nuevas: Sal de tu zona de confort. Aprende a adaptarte a grupos diferentes.
Duerme 8 horas diarias
Debemos darle el descanso suficiente a nuestro cuerpo y mente. Lo recomendable es ir a la cama a eso de las 22:00, pues así podremos comenzar el día desde temprano. Los beneficios se harán presentes de inmediato. Duerme 8 horas diarias y evita el estrés.
No te guardes malos sentimientos
Es un hecho que acumular emociones desagradables forja el mal humor. No te guardes aquello que te desagrada, ni tampoco des por sentado las suposiciones en quienes te rodean. Di lo que piensas, tranquilamente. Evita llegar al límite.
Haz que cada día sea único
Permite que tu andar se despliegue con naturalidad; concédete el placer de conocer algo nuevo. Ya sea para ver, escuchar o probar, trata de experimentar y vivir al máximo cada día.
Tampoco te llenes de expectativas, deja que las cosas fluyan. Llénate de pensamientos positivos y proyéctalos a tu realidad. Realiza cosas que no te habías atrevido a hacer antes, siempre y cuando sean cosas buenas para ti.