¿CRISIS DEL ESTADO EN SURAMÉRICA?

Las condiciones actuales han presentado grandes retos para los teóricos del Estado, en donde las grandes transformaciones sociales y económicas han ido, paulatinamente, modificando el papel del Estado y sus funciones dentro de la sociedad. El debate ha llevado a preguntarse, desde la ciencia política, ¿si el Estado está en crisis o si por el contrario esta en un proceso de transformación y consolidación? Este artículo tiene como objetivo analizar, desde Moncayo y Pérez-Liñán , el momento actual del Estado y percibir si éste está o no en crisis.

Pérez-Liñán parte su análisis desde las crisis presidenciales que se presentaron en América Latina (Brasil, Venezuela, Colombia, Ecuador y Paraguay), en donde varios mandatarios se vieron envueltos en procesos de juicio político. Según éste autor los juicios políticos recientes constituyen la punta del iceberg de una tendencia mucha más amplia que está apareciendo en la política latinoamericana.

América Latina se está enfrentado a un patrón característico de inestabilidad institucional que representa una ruptura con el pasado (PEREZ-LIÑAN, 2009. Pp 19), en donde las disputas intra-institucionales entre los poderes ejecutivo y legislativo se han ido resolviendo de una forma distinta a como se había venido resolviendo en los años 80’s (Dictaduras). Éste autor plantea que estas crisis presidenciales han producido grandes inconvenientes institucionales que en muchas ocasiones obliga a la sociedad civil a movilizarse para tratar de encontrar transformaciones y soluciones al orden constitucional, aparentemente distorsionado.

Queda presente que el Estado en los últimos 20 años ha sufrido grandes cambios, no sólo en su estructura sino también en su funcionamiento. Pérez-Liñán señala que los procesos democráticos latinoamericanos han generado rupturas con su historia. Según Moncayo estos cambios obedecen al nuevo papel que se le ha ido asignando al Estado, en donde su definición moderna de soberanía y legitimidad han sido superados, disminuyendo así el poder sobre la sociedad civil.

Estos cambios se han venido presentando desde la decadencia del Estado de Bienestar, en donde la economía ha ido impulsando una reestructuración del Estado para que éste garantice una flexibilidad en los agentes y mercados para la maxificación de los beneficios de los capitalistas. Desde esta perspectiva, ambos autores señalan que estamos en un cambio de lo entendido por Estado y por su función, pero tal vez existan matices frente a esta conclusión por parte de cada uno de los autores. Tal vez por la naturaleza y objetivo del estudio de Pérez-Liñán la transformación del Estado no es tan evidente como para Moncayo, pero si denota grandes transformaciones en la dinámica societal.

Se está atravesando un proceso de grandes transformaciones dentro del Estado pero aun no se ha señalado si estamos en un momento de crisis del mismo. El fenómeno de la caída de los presidentes electos no ha causado el colapso de los regímenes democráticos durante la era democrática actual (PEREZ-LIÑAN, 2009. Pp 111). Si bien el proceso de juicio a los presidentes ha generado cierta zozobra constitucional, aun no se ha producido un escenario de colapso dentro de los mismo principios del Estado o de los pilares de la democracia, en esa medida no estamos en presencia de una crisis del Estado.

Sin embargo, Moncayo asume que las dinámicas del mercado y de la economía capitalista han generado una crisis en el concepto moderno de Estado, llevando a que el Estado de Bienestar que prevaleció en el siglo XX, sea desplazado para poder garantizar una flexibilización en los mercados para que el sistema capitalista siga siendo rentable. El Estado ha dejado de ser el garante del funcionamiento del mercado, para ser un simple veedor de los procesos económicos, en donde su capacidad de influencia dentro de toda la sociedad civil ha mermado y el mismo concepto de “soberanía” ha desaparecido debido a la necesidades de internacionalizar los mercados e insertarse en la lógica de la aldea global, que plantean los teóricos de la globalización. Pero si bien, este nuevo Estado se minimiza respecto de su predecesor, su aparato coercitivo es cada vez más fuerte, ya que al negar espacios de inclusión dentro del mercado, se generan procesos de deslegitimación frente a la estructura estatal y por ende se debe controlar la continuidad del modelo.

Si bien estamos atravesando por un proceso de crisis, ésta no es una crisis que apunte al colapso del Estado, sino a una transformación que garantiza la viabilidad del modelo capitalista. En ese sentido, entendemos la crisis como una oportunidad de revitalización del sistema capitalista que, en efecto, puede significar tragedia para los trabajadores y también para muchos agentes capitalistas en particular, pero en lo esencial es una bendición para el capitalismo como sistema. (MONCAYO, 2004. Pp 97).

Como conclusión, queda claro que se está viviendo un proceso de reestructuración del Estado en Suramérica, en un escenario de crisis, que en palabras de Moncayo, busca es una superación de las contradicciones suscitadas por las disparidades económicas. Los grandes cambios que se han venido presentando, como son la globalización y la instauración del modelo neoliberal en las economías, han llevado a fuertes transformaciones societales que han ido agudizando las contradicciones entre la sociedad y el Estado, estas mismas contradicciones pueden tener como producto las movilizaciones sociales y juicios políticos a presidentes en América Latina como formas de resistencia frente a los cambios acontecidos.

Biblografía
• MONCAYO, Víctor Manuel. El leviatán derrotado. Grupo editorial NORMA. Colombia. 2004.
• Pérez-Liñán, Aníbal. Juicio político al presidente y nueva inestabilidad política en América Latina. Fondo de cultura económica. Argentina. 2009.

Escritor: Camilo Andrés López Mora