El consumo

La publicidad, la periodicidad, la necesidad de consumir. Hay que considerar si la publicidad no es engañosa, cuántos productos son necesarios y si es imprescindible renovar un artículo. Esta parte del ciclo es la más importante, ya que es la que motiva todo el proceso y en la medida en que acelera el consumo de artículos, la extracción, producción y distribución también deben acelerarse.

En esta etapa es importante considerar las necesidades que tenemos y el nivel de consumo que tenemos de muchos productos. realmente necesitamos renovar nuestro teléfono móvil cada año ?, cada temporada tenemos que comprarnos unos zapatos nuevos?, cuando un ser querido hace el aniversario, es necesario comprar algo o puedo hacer alguna que yo mismo para obsequiarle?

En esta etapa la publicidad ocupa un lugar privilegiado, en cualquier lugar y en cualquier momento recibimos mensajes que nos animan a consumir más productos. En todos los casos el coste de la publicidad del acabamos pagando los consumidores ?, de donde provienen los recursos para pagar las personas famosas, futbolistas o actrices que nos intentan convencer para consumir una u otra marca?

Para continuar vendiendo las empresas han desarrollado dos conceptos que nos obligan a seguir en esta carrera: la obsolescencia programada y la obsolescencia percibida. La obsolescencia programada se puede ver fácilmente en los productos tecnológicos, cada vez se reduce más el tiempo en que un determinado artículo es el «más moderno» y entonces debemos renovarlo porque no es el mejor, pero realmente necesitamos uno nuevo ?.

La obsolescencia percibida es la que socialmente nos creemos, el mundo de la moda es el mejor ejemplo: si no tienes la camiseta de la marca de moda eres un anticuado y tienes que ir volando a la tienda para tenerla, aunque no la necesites. Además de gastar más y desperdiciar recursos, qué consecuencias tendría si consumiéramos sin límite ?.