En un mundo, donde la publicidad forma parte de nuestra sociedad, donde un cartel puede llenar de necesidades o impulsos de comprar un producto o simplemente, influir en el comportamiento de algunas personas, algunas publicidades contienen un “doble sentido”, ya que utilizan un tipo de imagen o frase que se trasmite fácil y confiablemente por televisión, internet u otro tipo de medio de comunicación, logrando adentrarse fácilmente en las conciencias infantiles, dejando mensajes positivos o negativos, que aumentan con las repeticiones de los comerciales generando confusión y necesidad de consumismo.
Dentro de su conformación de pensamiento los niños poseen un grado de inocencia que se convierte en la puerta de entrada de la publicidad de doble sentido, cautivando la atención de los infantes con productos que llevan implícitos mensajes de inferioridad o del cumplimiento de determinado rol dentro de la sociedad. Pero no solo afecta a los niños, la publicidad también afecta a las adultos que creen en la cicatrización, las milagrosas cremas quita arrugas o métodos para bajar de peso, como si estas fueran formulas milagrosas que detienen el implacable paso del tiempo, el metabolismo y demás agentes que intervienen en la constitución del cuerpo humano. Los efectos de la publicidad, pueden ser problemáticos en la percepción infantil, adolecente y adulta, es decir, no se podrá tener control sobre la publicidad que siguen predominando en el mundo: pero si se puede estar sobre ella, por medio de la lectura constante, información clara sobre los avances de la publicidad y la constante critica acerca de cada comercial en cualquier forma de comunicación, logrando un cambio drástico por parte de la creatividad fundamental que podemos ir obteniendo mediante el análisis de un simple comercial que puede tener un doble sentido dirigido a cualquier persona o un público especifico.
La curiosidad, es otro factor importante que va ligado a el análisis crítico que se puede tener en una forma publicitaria, ya que influye de manera positiva o negativa por nuestra cuenta, de igual forma las preguntas constantes, acerca de lo necesario que es el producto para nosotros, ¿de qué manera el emisor me está ofreciendo el producto? o ¿qué tipo de tipografía o imágenes utiliza para llamar mi atención?, son formas de defendernos ante el constante movimiento publicitario que se tiene o que se vive, en cualquier parte de la calle, cuidad o país. Ahora bien, la principal función de la publicidad es lograr convencimiento respecto a un producto, consolidando una posición de esta dentro del mercado y e imaginario colectivo de los individuos. Además de los medios de comunicación ya establecidos, la publicidad se vale de internet para difundir sus mensajes y cautivar mayor público objetivo.
El gran problema de la publicidad por internet radica en que esta no tiene ningún tipo de regulación ni control, dada la libertad y facilidad de acceso que esta posee. Un claro ejemplo de publicidad falsa o engañosa son los productos de comidas rápidas, las diferentes empresas que se encargan de esto muestran con carteles o campañas publicitarias una apetitosa, deliciosa y bien prepara hamburguesa, perro caliente, pizza entre otras. Generando deseo de consumir el producto a través del mensaje o la imagen, en realidad los productos no corresponden a la imagen difundida, ya que el alimento es pequeño, grasoso y de aspecto desagradable o simple, por esta razón es que a veces, la publicidad se sale del contexto de la realidad, dando a entender a algunas personas, que la comida rápida hecha por algunas empresas es engañosa y perjudicial para la salud, pero aun así hay persona o consumidores que lo compran sin importar las consecuencias.
Por otra parte, la televisión es un medio de comunicación necesario en la publicidad, ya que es donde se concentra la atención de la mayoría de personas, pero el problema radica en los niños, ya que son los más vulnerables en cuanto a comerciales de bebidas embriagantes, ya que al no querer perderse un poco de su programa favorito durante los comerciales, captan toda su atención en cada anuncio publicitario, donde su mente se expone a la necesidad o requerimiento de probar el producto que se muestra, por ello existen casos de poca obediencia o comportamientos agresivos hacia los padres o acudientes de los menores al no obtener lo que se muestra en televisión, donde se escucha en la radio o de igual forma donde se vio en la web. Además, cada persona decide en qué forma influyen los comerciales en sí mismo, pero con un niño, se deben tomar precauciones como: evitar tanto tiempo o relación con la televisión, el tiempo que esté navegando en internet sea en compañía o bajo las instrucciones de un adulto responsable del menor, así, es más factible alejar las malas influencias de la información que no es adecuada para ellos en el futuro.
Por ello es necesario comprender que una publicidad beneficiosa, es aquella en la que su propósito además de convencer al cliente de comprar su producto, es la que deja un mensaje directo y real, es decir, toma un acontecimiento que esté ocurriendo en el mundo, para utilizarlo como consejos, opiniones o simplemente recordar y aprender según lo que haya sido, bueno o malo obteniendo un nivel de reconocimiento alto y un mayor número de ventas por sus ideas, que no tienen relación alguna con la publicidad engañosa, pero si por mostrar el pasado de nuestras acciones, el presente y el del mundo hacia el que nos dirigimos. Hay compañías que entienden, la facilidad de emplear este tipo de publicidades, ya que adquieren mejor ganancia y reconocimiento, destacándose como una empresa que no solo piensa en vender y ganar, sino en vender, dejar un mensaje, ganar y aprender de los consumidores, logrando una retroalimentación, que no solo se basa en la actitud de las personas sino en sus verdaderas necesidades.
Escritor: Johanna Ramírez doncel