Cuando hablamos de filosofía, inmediatamente nos remitimos a acontecimientos, lugares y personajes de la historia como el Liceo, la Academia, Grecia, Atenas, Sócrates, Platón, Aristóteles, entre otras tantas cosas a las que llamamos “hechos históricos”, queriendo hacer ver a la filosofía como una ciencia muerta o pasada de moda sin darnos cuenta que es en ella donde se encuentran las pautas para vivir bien y felices. La filosofía también es llamada “amor al conocimiento”, es decir ella la que nos permite dar el primer paso para transitar por los fascinantes senderos del conocer, donde cada paso es sinónimo de recibir y de adquirir sabiduría, nutriéndonos de miles y miles de experiencias que nos ayudaran a enriquecer nuestra existencia para llegar a la tan anhelada felicidad.
Y pensar que la filosofía está presente en cada instante de nuestras vidas, desde que nos levantamos, hasta que nos acostamos, desde que nacemos, hasta que morimos y quizás hasta después de morir, es tan emocionante saber que nosotros podemos decidir cuál pie colocar primero al levantarnos, que ropa usaré, e infinidad de decisiones que debemos tomar en nuestra cotidianidad que siendo simples terminan siendo complejas, y son aquellas decisiones las que nos permiten gozar de nuestro raciocinio para engrandecer la virtud de nuestro pensamiento convirtiéndolo en acciones enriquecedoras para vivir.
También es la filosofía la gestora de que lleguemos a ser seres desprendidos de lo material y consientes de darle más sentido a lo realmente importante la espiritualidad y lo aparentemente simple para que por medio del conocimiento adoptemos una posición crítica frente a nuestra forma de actuar y de enfrentar la vida para tomar decisiones que nos permitan descubrir y transformar las razones de nuestra maravillosa existencia. También debemos de tener presente que la filosofía nos ayuda a confrontarnos a sí mismos y decidir qué tipo de vida queremos vivir. Por ultimo cuando tengamos claro que es lo que nos interesa para nuestra existencia debemos mantener una motivación constante para alcanzar la felicidad a través del amor, el pensamiento, los valores y la reflexión.
Escritor: marta bibiana lasso cruz