Habilidades útiles para Liderar Equipos de Trabajo

Un gerente de proyecto requiere tener además de conocimientos acerca de gestión de proyectos, una serie de habilidades interpersonales que le servirán para cumplir su principal función: la comunicación con todos los interesados. Entre estas habilidades, es de destacarse aquellas que le servirán principalmente para liderar al equipo de trabajo. En éste artículo describiremos dos de  éstas habilidades.

El liderazgo es una de las principales actividades que está asociada a la gestión de proyectos. Ser un líder es la habilidad de lograr que el equipo de trabajo enfoque sus esfuerzos en un fin común, con lo que un grupo de personas se convierte verdaderamente en un equipo de trabajo. En otras palabras, el liderazgo es la habilidad de lograr que las cosas sean realizadas a través de otras personas. El respeto y la confianza son los dos ingredientes principales del liderazgo verdadero, que no deben confundirse con miedo y sumisión, que si bien en ocasiones logran los mismos resultados, no son un verdadero liderazgo y a la larga no son efectivos. En el contexto de un proyecto, aunque ésta habilidad es importante a lo largo de toda la ejecución, cobra especial relevancia al principio del proyecto, pues es en ésta etapa en la que se transmite al equipo de trabajo la visión y los objetivos del proyecto, y es el momento crucial para inspirar y motivar al equipo de trabajo.

La siguiente habilidad que requiere el gerente de proyecto para liderar el equipo de trabajo es la habilidad de construir un equipo. Aunque a primera vista pareciera ser lo mismo que el liderazgo, ésta es la habilidad de lograr que se creen los lazos de unión entre el grupo de personas para perseguir un mismo fin común. Hay diversas actividades que se realizan para construir un equipo de trabajo. Entre las principales y más trascendentes, tenemos la correcta definición de roles, responsabilidades y procedimientos, así como el establecimiento de metas, que son elementos clave para que el equipo funcione de forma efectiva. Además, el manejo de procesos para manejar conflictos, comunicación y motivación son de vital importancia para lograr la construcción de un equipo de trabajo. El manejo de conflictos tiene como principal beneficio el lograr manejar los problemas de manera objetiva, evitando culpar a los miembros del equipo de los problemas que se suscitan. Lograr abrir los canales de comunicación con los miembros del equipo y entre ellos es el resultado de la confianza generada en el interior del equipo; y la motivación mantendrán siempre inspirados a los individuos. La habilidad para liderar el equipo es por ende un proceso continuo a lo largo del proyecto, pues de principio a fin hay que afrontar los cambios del proyecto.

El resultado de la habilidad para liderar el equipo de trabajo bien llevada sumada al liderazgo es el trabajo en equipo; éste incluso puede mejorarse mediante la obtención del soporte de altos niveles gerenciales, con lo que se puede lograr impulsar el compromiso del equipo a través de programas de reconocimiento con lo que se crecerá la moral y se obtendrán mejores resultados.