LA OTREDAD Y LA POIESIS EN LA EDUCACIÓN

En el libro “1984” George Orwel nos simboliza el poder de la manipulación hacia una sociedad, aprisionándola en la soledad e incomunicación que les proveen otros a través de la compactación del lenguaje, abandonando a ésta en la oscuridad de la ignorancia y del desconocimiento de sí misma. La extensión de la cultura no es posible si no se estimulan sus bases, una de las bases primordiales para cualquier individuo y sociedad es la educación.

En México existen diversos proyectos y medios para extender la cultura pero la disyuntiva que también existe es que no se puede sembrar en una tierra a destiempo, cuando el clima y el momento no son los propicios, no se puede cosechar cuando la tierra no está en su punto fértil. Hay que estimular desde la raíz. Para poder lograr un avance en cualquier área de las ciencias y el humanismo el primer elemento que se debe estudiar es el ser humano desde su niñez.

A través de la creación de una estructura didáctica/pedagógica por medio de la implantación de un proyecto que toma sus bases en la filosofía, la pedagogía y la artes el individuo logra una toma de consciencia, conocimiento sin consciencia es un conocimiento suicida. Desde el punto de vista personal para construir cualquier sociedad se debe codeconstruir al individuo. El individuo al tomar consciencia comprende que la naturaleza es su habitar y en consecuencia comienza a depurarse como individuo y éste a la vez contagia a otros a través del entusiasmo y de una forma didáctica para que su relación con la naturaleza y los demás sea armoniosa. A través de la experiencia personal hemos constatado que en la comunicación este rol es básico y en las relaciones humanas es de la misma forma: un tomar y dar. Dentro de las áreas del conocimiento como la filosofía, la antropología, la sociología y la pedagogía la otredad es un acercamiento a uno mismo a través de lo otro y los otros. La principal preocupación de la educación es formar humanos incluyentes en la familia, la escuela, la sociedad… en el mundo. Personas aptas para realizar labores que conlleven un discernimiento para la solución de problemas. En el método constructivista que sugiere competencias para el desarrollo de habilidades en el párvulo la mecánica es saber-saber, saber hacer y saber ser. La fórmula es efectiva en teoría pero con un pequeño movimiento sería más eficaz si sólo se cambiara el orden de los factores: Saber que se es y saber para hacer y transformarse en otro ser.

Desarrollo

Descripción de los conceptos

Otredad: Lo otro y los otros, que la antropología social describe como el encuentro entre culturas: diferencias y semejanzas en costumbres, mitos, ritos, creencias  y tradiciones y que la pedagogía apoya con la implementación de factores axiológicos para el respeto y la comprensión de las mismas entre ellas, pero también existe la otredad filosófica que ésta es a través de la extrañeza que se manifiesta en el humano para tratar de comprenderse y evolucionar en otro y que el psicoanálisis reafirma al comentarnos que las palabras se manifiestan en el humano como algo aprisionado en el cuerpo. Que si somos más observadores podemos constatar que vivimos gran parte de nuestras vidas, sin hacerlo consciente, en la otredad a través del mito, el rito, las creencias y la tradición.

Poiesis: Es creación, transformación y ésta se manifiesta tanto en el individuo, la sociedad y la naturaleza. La biología nos la expresa como la reconstrucción de los tejidos dañados y que la filosofía la cataloga como la extracción de la aparente nada para que de ésta exista algo. La poiesis —que de ahí proviene la palabra poeta— es la misma palabra porque las palabras se pueden deshacer y crear nuevas con disimiles significados y esta acción mantiene una comunión con la otredad porque el humano al devastarse a sí mismo se transforma en otro al igual que las palabras.

Analogía del maestro con el poeta

El maestro es un poeta porque al igual que éste crea, dirige, transforma y extrae de donde antes en apariencia existía la nada para que esta sea. Extrae del interior del humano y transforma, es creación.

La codeconstrucción

La palabra código proveniente del griego codex, nos remite a un libro de leyes o normas, pero también al significado que en conjunto nos remite a un sistema de signos o señales y reglas que permiten formular y comprender un mensaje. Es comunicación. Los códigos en el lenguaje nos permiten desenvolvernos en ciertos lugares, con ciertos entes y con nosotros mismos como seres individuales. Los códigos no sólo son exclusivos del lenguaje hablado o escrito, sino también de otros tipos de lenguajes como el kinestésico que se expresa a través de los movimientos corporales, los gestos y las señales, o el lenguaje proxémico, en el cual se integran otros tipos de lenguajes que poseen relación con las tradiciones; el folklor, las creencias, costumbres y hasta cierto punto, con cuestiones meramente subjetivas como la moda, momento histórico y estatus o estratos sociales que permiten la identificación entre humanos y el lugar donde se desenvuelven, lo semiosférico.

En algunos casos los códigos ya conjuntos o individuamente pueden ser polisémicos como el símbolo, que pueden ser disimiles los significados que contiene, pero en la mayoría de los casos estos significados no son totalmente propiedades de los símbolos sino de quien decodifica estos símbolos porque en esta dinámica ya se incluye lo anteriormente escrito con relación al lenguaje proxémico: las tradiciones, costumbres, estratos, creencias y otros conceptos más que son parte de una cuestión meramente social, además de aquellos otros elementos que son propios de cada individuo que decodifica estos símbolos, por lo mismo en una sociedad que está integrada por las mismas creencias una cruz puede significar la vida o totalmente lo contrario, la muerte, porque la forma de decodificar este símbolo ya depende de cuestiones totalmente intrínsecas de cada individuo. Continuando con la acepción de la palabra codeconstrucción, también podemos interpretarla desde el prefijo “co”, que significa acompañamiento; unión, colaboración. Nos remite a un trabajo en conjunto.

La palabra construcción que es fabricar y edificar ya unida a este prefijo pero también integrada con la connotación de la palabra code, que en inglés es código, nos confiere a que la palabra deconstrucción es una construcción en conjunto pero a la vez con códigos ensamblables. Queremos decir que son códigos que se pueden usar y retomar para crear algo totalmente distinto con ayuda de otros códigos, que es lo que hacen los poetas con las palabras, que con los mismos códigos crean disimiles universos. La unión de una palabra sajona como es code también nos lleva al español de México que es una mezcla de una gran variedad de lenguas e idiomas que nos permite codeconstruir el lenguaje constantemente —que como sabemos el lenguaje no es algo estático, siempre está en movimiento— y que también se usa en el mundo a través de las nuevas tecnologías de información.

Estructura constructivista

Saber saber-saber hacer-saber ser

Estructura codeconstructivista

Saber que se es y saber para hacer y transformarse en otro ser

El télos o la función final de un educador es la formación de humanos, por lo mismo la palabra educar significa extraer y dirigir para ser. Es la misma función que la poiesis, extraer de la aparente nada para que sea. En la educación es extraer del individuo donde está aquello que no podemos ver, tocar, oler u oír para que sea, exista, signifique. Extraer los talentos y aptitudes del humano para guiarlos y sean punto de partida para la formación de la actitud. Educar es parte de la poiesis, y al igual que en ella, la otredad es una vía para acercarse a la educación. A través de reflexionar en la pedagogía con relación a esos otros que somos podemos tener una noción de lo impredecible del humano como individuo, pero también comenzar a estructurar una forma de identificar circunstancias, causas y situaciones que lo alteran, que lo hace ser otro. Los humanos al alterarnos negativamente somos otros y casi siempre violentos, y esta alteración nos conduce a la culpa y a la depresión, y es a causa de un desconocimiento personal, que es lo que ha quedado fuera de la didáctica y pedagogía en la educación.

El tipo codeconstructivista en la educación era ya usado en la antigüedad, Sócrates lo implementaba como parte fundamental de la educación a través de la mayéutica, donde su fin era que a través de las preguntas —la palabra— el individuo se pariera así mismo, crearse nuevamente, aprender a desaprender. El fondo es saber que es un humano y educarse para renacer en otro.

Concienciar que se es humano:

Defectos-virtudes

Valores humanos

Estimulación y comprensión de sensaciones

Emociones y sentimientos.

Lenguaje y acto.

Implementación de conocimientos académicos, artísticos y humanos y su interrelación con lo cotidiano: Qué y para qué: Ciencias, artes en la casa, ciudad y escuela Pensamiento convergente y divergente. Canalización, estructuración del conocimiento habilidades para comprender el mundo. Saber que se es para transformarse en otro se a través del conocimiento y la habilidad para hacer. Instrucción y comprensión de los métodos.

Como podemos observar la estructura constructivista es piramidal y esto simbólicamente también nos habla de los cotos de poder en lo que se ha convertido la educación donde se extravía el sentido real de la misma y que es la “formación humana”. En la codeconstrución la estructura es circular y nos habla simbólicamente de lo cíclico, de aquello que se termina y regresa a comenzar de nuevo, donde se empieza se acaba y donde se acaba empieza.

Escritor: Obed González