Los montes, como la tierra y el campo, desempeñan un importante papel en la poesía de Antonio Machado. En cuanto trepo a la cima del monte T’ai, me parece que se reducen todas las cosas debajo de mis pies mientras mi campo visual se amplia poco a poco a causa del aumento de la altura.(登泰山而小天下) escribió Confucio en una excursión a dicho monte. Sin embargo, aunque los montes en Soria no son tan altos con el que trepó Confucio, los colores variados que aparecen a lo largo del camino le dieron una muy brillante impresión a nuestro poeta:
Es el campo ondulado, y los caminos
ya ocultan los viajeros que cabalgan
en pardos borriquillos,
ya al fondo de la tarde arrebolada
elevan las plebeyas figurillas,
que el lienzo de oro del ocaso manchan.
Mas si trepáis a un cerro y veis el campo
desde los picos donde habita el águila,
son tornasoles de carmín y acero,
llanos plomizos, lomas plateadas,
circuidos por montes de violeta,
con las cumbers de nieve sonrosada.
(Pomea CXIII-III, Poesías completas, p.155)
¡ Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas
por donde traza el Duero
su curva de ballesta
en torno a Soria, oscuros encinares,
ariscos pedregales, calvas sierras,
caminos blancos y álamos del río,
tardes de Soria, mística y guerrera,
hoy siento por vosotros, en el fondo
del corazón, tristeza,
¡ tristeza que es amor ! ¡ Campos de Soria
donde parece que las rocas sueñan,
conmigo vais ! ¡ Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas!…
(Poema CXIII-VII, Poesías completas, p.157)
Quizá poema sea fue el fruto después de una excursión o del paeso diario que el poeta daba por la tarde. Machado, evidentemente no fue tan incisivo como Confucio, que se preocupaba por el tiempo y el espacio, o por los seres humanos de su tiempo. En pie en la cima de alguna colina anónima, mirando y observando Soria a vista de pájaro, dejó fluir el universo íntimo de su primera obra (Soledades) para fundirse con el paisaje y las gentes castellanas con su propia visión machadiana subjetiva.
El poema es pura expresión sentimental, tras serie de exclamaciones que expresan un estado anímico de intensa emotividad. El tema es la relación del narrador,el Duero y los campos de Soria- su profunda tristeza-Tal vez por eso ve la naturaleza tan triste o con colores melancólicos. Es la descripción de paisajes por donde cruza el río Duero. La metáfora “curva de ballesta” indica la forma del Duero que rodea a Soria. Luego habla sobre su camino a Soria y allí vuelve a descibir la naturaleza,bastante sombría porque dice “oscuros encinares..” La palabra clave “tristeza”, que recoge el sentimiento del poeta, se repite al final de un verso y principio del siguiente; pasa luego a identificarse con el amor. La visión del paisaje no provoca en el autor una reacción de euforia y entusiasmo sino de melancolía, que se mezcla con el inmenso afecto que tiene a esas tierras.
El poema siguiente, mejor dicho, es el prólogo de todo el poema “ A Orillas de Duero”, En él, el poeta canta la sencillez de la tierra soriana a través de su paisaje humilde. Al principio el autor solo utiliza adjetivos y sustantivos, para darle una sensación de alegría a la hora de describir el paisaje. El tema escogido por Machado en esta parte es la mera descripción del paisaje que se ve en torno a las orillas del río Duero. Nos describe las proximidades del Duero con elementos reales y con sensaciones propias para explicar el ambiente, que es una descripción muy detallada acerca del paisaje natural de Soria en una hermosa tarde de verano. El poeta describe, una subida interesante al monte y un encuentro sorprendente con diferentes vidas a lo largo de su camino. Para Antonio Machado, este viaje no fue sólo una excursión ordinaria, sino un homenaje hondo y espiritual a la naturaleza:
Mediaba el mes de Julio. Era un hermoso día.
Yo, solo, por las quiebras del pedregral subía,
buscando los recodos de sombra, lentamente.
A trechos me paraba para enjugar mi frente
y dar algún respiro al pecho jadeante;
o bien, ahinchando el paso, el cuerpo hacia adelante
y hacia la mano diestra vencido y apoyado
en un bastón, a guisa de pastoral cayado,
—Veía el horizonte cerrado por colinas
oscuras, coronadas de robles y de encinas;
desnudos peñascales, algún humilde prado
donde el merino pace y el toro, arrodillado
sobre la hiebra, rumia; las márgenes del río
lucir sus verdes álamos al claro sol de estío,
y, silenciosamente, lejanos pasajeros,
¡ tan diminutos! –carros, jinetes y arrieros –
Cruzar el largo Puente, y bajo las acadas
de piedra ensombrecerse las agues plateadas
del Duero…
(Poema XCVIII, Poesías completas, págs.137-138)
Al mismo tiempo, los montes son grandes amigos del poeta. Veo qué agradables son los montes verdinos, supongo que me consideran lo mismo.(我見青山多嫵媚,料青山見我應如是), literato notable de la dinastía Sung de Sur, dijo una vez en su obra. Tal expresión personificada y subjetiva justamente representó una relación armónica y equilibrada entre los seres humanos y la naturaleza. En el poema CIV, veremos una “conversación” corta pero entrañable por parte de Machado a “ un viejo amigo suyo “:
¿ Eres tú, Guadarrama, viejo amigo,
la sierra gris y blanca,
la sierra de mis tardes madrileñas
que yo veía en el azul pintada ?
Por tus barrancos hondos
y por tus cumbers agrias,
mil Guadarramas y mil soles vienen,
cabalgando conmigo, a tus entrañas.
(Poema CIV, Poesías completas, p.147)
En definitiva, Antonio Machado es un experto en el uso de los colores vivos que dieron vida a los montes en sus poemas. Respecto a su estilo, los montes de Soria, en cierto sentido, ya se habían convertido en un reflejo del su yo, de la integridad de sí mismo. En un medio recogido y austero Machado abre su alma al campo castellano, y se adentra en su hermosura. La voluntad y el instinto parecen dirigirle hacia la contemplación del ámbito que le rodea.
Autor: Wang Jung
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