Diseñar y construir cada año un proyecto general se convierte en una valiosa oportunidad para el colectivo de maestros y maestras al poder conjugar sus expectativas, deseos e intereses, junto a los de los niños y las niñas. Es la posibilidad de poner en diálogo el saber cotidiano, escolar y especializado, experiencias e inventivas que enriquecen y consolidan nuestra carta de navegación materializada en un proyecto pedagógico, el cual orienta nuestro quehacer durante el año. Por su parte, las familias se convierten en los acompañantes de esta travesía emprendida año tras año, y también aportan de manera significativa al proyecto que se pone en marcha.
En este sentido los aportes de niños, niñas, maestros, maestras y familias, al transcurrir el año serán vitales, el lograr que el proyecto se redimensione, fortaleciendo sujetos, procesos de construcción de conocimiento y además, lograr dotar de sentido, significado, sorpresa, gusto y rigurosidad, las experiencias que éste nos plantea evidenciando la pedagogía proyectiva; su impacto y materialización en pro de nuestros grandes protagonistas: “los niños y las niñas (4 a 10 años)”.
Este año, las búsquedas del colectivo de maestros y maestras para determinar el proyecto, se centraron en el pensamiento lógico matemático, en ¿cómo afectarlo de manera significativa desde la cotidianidad? , y a su vez cómo propiciar experiencias en relación con los objetos, entornos, rutinas diarias; y al mismo tiempo posibilitar la constitución de sujetos más reflexivos que logren valorar la riqueza de la cotidianidad desde sus usos, aplicaciones y necesidades; para de esta forma re significarla, interpelarla y dimensionarla, desarrollando habilidades como la abstracción, análisis, síntesis, comparación, clasificación, entre otros.
Cuando hacemos conciencia de la cotidianidad logramos evidenciar y dimensionar procesos que están implícitos en el diario vivir, y que son un claro ejemplo de lo lógico matemático; de esta forma no pasarán desapercibidos aspectos como por ejemplo: la aparición del sol como referente de orientación; así mismo acciones como la de tomar el bus y determinar en qué dirección nos dirigimos, pagar el pasaje, recibir las vueltas y evidenciar cuánto sobra o falta de dinero; hacer una compra en la tienda , seleccionar nuestra talla de vestido, zapatos; participar en un juego de la cultura como el parqués, la golosa, el ajedrez e identificar objetos que nos determinan cantidades como: un dado, un domino y nos invitan a desplazar las fichas de acuerdo a la cantidad; ubicarnos en un lugar a partir de un plano, un mapa y leer el reloj para saber qué hora es, en fin; cuando nos detenemos en los procesos que están implícitos en la cotidianidad logramos percibir su carácter matemático, comunicativo, cultural, social, histórico, entre otros; que al retomarlos intencionadamente se convierten en un valioso aporte desde sus usos y aplicaciones como: el número, la geometría, la tecnología, el arte, etc.
La idea es tener presente la cotidianidad , interpelarla otorgándole más sentido desde el diario vivir evidenciando la utilidad en este caso de las matemáticas y no dejarla ajena o restringida solo a los algoritmos y problemas de carácter aritmético, que incluso en ocasiones no responden al contexto de los niños y las niñas. De ahí nuestra intención de recurrir a la cotidianidad y trascenderla con experiencias que logren fortalecer y enriquecer los diferentes procesos.
De esta forma y luego de hacer un ejercicio riguroso y exigente logramos tejer la red que da origen al Proyecto MANDALA. Un nombre que surge y recoge el sentido y rumbo de este proyecto.
Etimológicamente esta palabra hace referencia a un “círculo”. Hace relación al pensamiento contenido dentro de un círculo; un dibujo centrado; todo tipo de imágenes organizadas alrededor de un punto central, que pueden contener múltiples formas geométricas y simbólicas. Los mandalas son diagramas simbólicos que han sido parte de la identidad pictórica de muchas culturas; originario de la India pero también se han encontrado representaciones de este tipo en otras culturas como los indígenas de América, por ejemplo, en el calendario azteca.
Este nombre se convierte entonces en un detonante, una invitación a acercarnos desde esta palabra que denota una representación, un diagrama, una red, figuras enlazadas, simetrías; donde convergen también el color, distintas formas, líneas, un centro que convoca al espectador a mirarlo e ir más allá.
En este círculo armónico confluyen las semblanzas y significados que le otorgan el autor que lo diseña. El Mandala a simple vista no sería una figura de patrimonio exclusivo desde una mirada matemática, pues puede interpretarse de acuerdo a la intensión que le demos desde diversos puntos; entonces ¿Por qué no podrían ser un mosaico donde se identifican (distintas variables o conceptos matemáticos: teselados, visiones ópticas) que de manera armónica podrían convertirse en una obra de arte en la que se hizo uso del ingenio, la sensibilidad y la emoción para plasmarnos a nosotros mismos, al entorno, el movimiento, la estética?, o ¿Por qué no podría ser un texto comunicativo que invita a leer, a descubrir mensajes, sentimientos, cualidades, a partir de grafías, dibujos e interpretaciones semánticas?. ¿Por qué no dejar que la palabra MANDALA desde su sonoridad vuele con las alas que forman parte de ella misma? En fin…
Nuestro proyecto MANDALA está inscrito en la Pedagogía Proyectiva, constituyéndose como la búsqueda de una alternativa para construir una manera de evidenciar y apreciar las relaciones e interacciones en la escuela; éstas se debaten entre las tensiones y los afectos, la construcción de conocimientos que permite a nuestros niños y niñas apropiarse y transformar su mundo y sus realidades, y por supuesto la consolidación de una manera de ser, actuar y pensar de niños y niñas, maestros y maestras que imprimen a su quehacer sentido y significado.
La Pedagogía Proyectiva es pues, el elemento fundamental que integra toda la filosofía institucional. Entendida como una concepción epistemológica, reconoce al sujeto desde sus múltiples dimensiones y concibe los conocimientos como unos procesos de construcción mental que cada uno hace a partir de lo que resulta significativo.
Así mismo, plantea una visión de currículo flexible, abierto, pertinente y colectivo donde se tiene en cuenta los intereses, necesidades y expectativas de sus actores (niños y niñas, maestras y maestros). Este currículo se reconstruye en el hacer, en el saber cotidiano, el saber científico, el saber escolar y el saber social; y en el constante cambio y conflicto propio de las sociedades. A partir de lo anterior se puede decir que la pedagogía proyectiva es además, un conjunto de herramientas didáctico-metodológicas que ponen de manifiesto la diversidad, la creatividad, el cúmulo de experiencias generadas por las propuestas y un incesante trabajo de la planeación, exploración, socialización y evaluación.
En este sentido MANDALA será el espacio recreado por la Pedagogía Proyectiva, que como finalidad evidenciará mayormente el pensamiento lógico matemático, de manera tangible y vivencial en la vida cotidiana y como ésta tiene afectación en nuestros conocimientos e interpretaciones del mundo que nos rodea, encontrando el uso, sentido, y alternativas en la resolución de problemas, no solo de carácter aritmético.
También será la excusa para recrearnos, compenetrarnos y descubrir las aplicaciones de distintos procesos, evolución e inventos que son parte del diario vivir; potenciando así la pregunta, observación, análisis y cuestionamiento de lo que nos rodea. Dentro de los proyectos, emergen tres elementos que nos permiten identificar el recorrido y que son claves para movernos en él, éstas son:
El contexto: El proyecto Mandala se enmarca dentro de la cotidianidad vista con lentes lógico matemáticos, nos referimos a las situaciones que pasamos a diario, y a las actividades que realizamos con frecuencia, dentro de un contexto específico. Elementos que integran la vida cotidiana como: los horarios en los que solemos despertarnos, comer, e ir a dormir; las rutas de los lugares a los que asistimos, el manejo del dinero, los turnos asignados, el contacto con la tecnología, la resolución de problemas, las estadísticas de las encuestas, las probabilidades, etc. Es entonces importante analizar el papel de las matemáticas en la sociedad, pues es allí donde tienen origen, en la necesidad de dar explicación y de organizar un mundo natural y también social.
De este modo hacemos referencia a la Cotidianidad, como ese punto de encuentro desde la amplitud de perspectivas que nos ofrece y el cual podemos abordar desde sus diferentes espacios y ambientes.
Los pretextos: Contaremos en el desarrollo del proyecto con algunos pretextos que nos convocarán a realizar experiencias, emprender caminos y apropiarnos de elementos relacionados con el origen, uso y aplicaciones del número, el comercio, el intercambio, el trueque, las representaciones y la resolución de problemas, la literatura, etc. Elementos que nos convocarán y nos ayudaran a identificar el uso de los números, comprender conceptos, desarrollar y/o fortalecer el pensamiento lógico matemático desde situaciones de la vida cotidiana.
Los textos: Serán las huellas, los descubrimientos y hallazgos encontrados en el recorrido del proyecto, la manera como se plasma, se transforman las vivencias y experiencias; los mismos conocimientos dando lugar a innumerables producciones que ponen de manifiesto la significación e impacto del proyecto durante el proceso. Por eso no será raro evidenciar innumerables producciones como preguntarios, diccionarios, palabrarios, juegos, artefactos, producciones literarias, espacio de intercambio como mercados, ferias, subastas, en fin, un sin número de posibilidades que nos ofrece el recorrido hecho por cada grupo en el proyecto.
Como una forma de organizar el recorrido del proyecto se establece unas etapas, estas son:
Primera etapa: “PIN 1, PIN 2, PIN 3…”. De ante mano es una invitación a jugar e iniciar el recorrido del proyecto explorando distintas ventanas y parajes desde la vida cotidiana generando la sorpresa, curiosidad por indagar así como develar los mensajes cifrados que hay tras ella.
Segunda etapa: “EMPROBLEMADOS”. Es la etapa donde se resumen los interrogantes e intereses que surgieron de la primera con más detenimiento, profundizando en aras de volvernos especialistas en las líneas de trabajo, así mismo es la etapa de mayor producción donde se materializan los saberes construidos en productos que tienen gran significación e impacto en los distintos niveles.
Y finalmente la tercera etapa: “CUENTA REGRESIVA”. Es el momento de socialización donde se cuenta el resultado del proyecto, su impacto, significación y se comparte el saber que se consolido en cada grupo a la comunidad.
Las diversas perspectivas que nos ofrece MANDALA, permitirán acercar a los niños y a las niñas a las distintas dimensiones del conocimiento construyendo aprendizajes de manera holística y buscar caminos posibles para relacionarlo con lo cotidiano. En este sentido el eje de la comunicación y expresión, potenciará la adquisición y el desarrollo de la lengua escrita desde los juegos de palabras (acrósticos, palíndromos, retahílas, ambigramas, retruécanos, etc.), acertijos, cuentos acumulativos, metáforas, textos informativos, publicitarios, datos curiosos, y producciones de análisis e interpretaciones.
También nos aproximaremos a procesos lógico matemáticos a partir de experiencias cotidianas y relacionadas con el proyecto como son: las nociones espacio-temporales (coordenadas, planos, rutas), las diferentes representaciones gráficas, numéricas y simbólicas: las líneas temporales, los árboles genealógicos, las historias de vida que contar, los usos del reloj, el tiempo cronológico y la causalidad histórica, entre otras.
Las formas geométricas presentes en el entorno y en las producciones relacionadas con el arte como mandalas, teselados, plegado, ilusiones ópticas; la historia del dinero y las relaciones económicas que de una u otra forma establecemos en la cotidianidad ( la compra, la venta, el intercambio, el trueque, los impuestos); registros comerciales( factura, inventario, cheque, pagaré, etc.), la comercialización de productos, sistemas de medida ( tiempo cronológico, el calendario, instrumentos de medida, análisis estadísticos, datos y probabilidades, entre otros.
Por otra parte, el pensamiento natural y la actitud científica lo abordaremos desde la capacidad que poseen los niños y las niñas para formular preguntas sobre los entornos inmediatos, desde la curiosidad y el asombro por los fenómenos de la naturaleza, la construcción de artefactos, y las experimentaciones que podemos realizar, lo que estimulará y guiará a los niños y las niñas a observar, comparar, explicar y analizar el mundo físico y químico que vivenciamos constantemente. De esta manera, los acercamientos al mundo físico y natural generarán en los niños y las niñas una actitud científica donde el planteamiento de hipótesis de acuerdo a cada nivel tendrá una explicación a situaciones concretas que experimentan a diario, como también el desarrollo de la capacidad comunicativa para argumentar y justificar las explicaciones.
El desarrollo de la descentración, la empatía y la ubicación tempero-espacial de los niños y las niñas constituye un propósito fundamental de nuestro proyecto, teniendo en cuenta las edades de cada uno de los grupos y procesos de desarrollo particulares. Lo asumiremos desde las representaciones y precepciones, los oficios y profesiones, los iconos, símbolos, el concepto de tiempo y de espacio, los mapas, rutas, convenciones y la cartografía. De igual forma nos orientaremos hacia el uso adecuado de los lugares compartidos, objetos, recursos y que además posibiliten el buen trato, la calidez y la asertividad; y del cuidado de sí mismo y del entorno, teniendo presentes elementos como: los hábitos de higiene, de trabajo, la alimentación saludable, el manejo adecuado de las basuras, su clasificación y posibles formas de reutilización, el consumo y sus implicaciones, el valor de las cosas, el uso del dinero y la resolución de conflictos.
Finalmente invitamos a las familias a participar de manera activa en el desarrollo del proyecto Mandala, a ser acompañantes e interlocutores de sus hijos e hijas, viviendo con entusiasmo las experiencias que este recorrerá; bienvenidos sus aportes, vivencias e ideas.
PROPÓSITOS GENERALES:
Identificar la relación existente entre la dimensión lógico matemática y comunicativa como medio de expresión de los múltiples lenguajes.
Potenciar el desarrollo de nociones y conceptos lógico matemáticos a partir de experiencias y actividades estructuradas, teniendo como referente la cotidianidad.
Fortalecer procesos de pensamiento social, natural, comunicativo y estético a partir de experiencias que incentiven la curiosidad, la pregunta, las hipótesis, la consulta y la argumentación.
Propiciar espacios de constantes reflexiones sobre el consumo, el intercambio, el valor de las cosas, el uso del dinero y las matemáticas en la vida cotidiana.
Acercar a los niños y las niñas a los orígenes, evolución e historia del número y el dinero para lograr una mejor compresión del uso y aplicaciones de éstos en el diario vivir.
Evidenciar el pensamiento lógico matemático como un lenguaje que vincula las diferentes manifestaciones sociales, culturales, artísticas, y científicas a partir de situaciones cotidianas.
Fomentar el uso de habilidades como la observación, clasificación, interrelación, análisis y comprensión en la resolución de problemas cotidianos.
Escritor: Ángela Castro